Nuria Díaz ■
La guerra y muy especialmente el precio de la electricidad ha disparado las instalaciones de autoconsumo, consolidando una tendencia qua ya venía sumando meses al alza hasta llegar a alcanzar a cierre del año pasado un crecimiento de más del 100% respecto a 2020, lo que consolidó 2021 como el mejor año de la historia de España para el crecimiento de la energía solar. Y en el sector creen que este año sólo puede ir a más gracias también al reciente incremento de las ayudas por parte del Gobierno, lo que, unido a los fondos europeos, ha provocado la curiosidad de varias firmas extranjeras que ya han desembarcado en nuestro país y están moviendo ficha para hacerse hueco en este mercado creciente.
Hace solo unos días, la secretaria de Estado de Energía del Ministerio de Transición Ecológica, Sara Aagesen, anunciaba en un congreso nacional sobre autoconsumo celebrado en Sevilla, que el Gobierno para poder atender la enorme demanda ciudadana provocada especialmente por el alto precio de la electricidad va a ampliar con 500 millones de euros las ayudas para la instalación de sistemas de autoconsumo energético, unas ayudas que aprobó hace menos de un año. En junio del año pasado el Consejo de ministros dio el visto bueno a dedicar 650 millones de los Fondos europeos Next Generation “para la ejecución de diversos programas de incentivos ligados al autoconsumo y al almacenamiento, con fuentes de energía renovable, así como a la implantación de sistemas térmicos renovables en el sector residencial”. Ese Real Decreto 477/2021 dejaba en manos de las comunidades autónomas la gestión de estas subvenciones hasta finales del año 2023, pero fuentes del sector señalan que, ha habido tal torrente de peticiones que son muchas las comunidades que ya han agotado los fondos del ministerio.
Desde la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) señalan que, efectivamente, “en 2021 el autoconsumo energético tuvo un crecimiento de un 102% respecto a 2020. Sumando los datos obtenidos a través de la potencia instalada en plantas suelo y autoconsumo podemos afirmar que 2021 fue el mejor año de la historia de España para el crecimiento de la energía solar
Desde la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) señalan que efectivamente “en 2021 el autoconsumo energético tuvo un crecimiento de un 102% respecto a 2020. Sumando los datos obtenidos a través de la potencia instalada en plantas suelo y autoconsumo podemos afirmar que 2021 fue el mejor año de la historia de España para el crecimiento de la energía solar.”. Y añaden que “aunque estamos a la espera de los datos de 2022, consideramos que este también va a ser un gran año para la energía solar en España. Valoramos muy positivamente el refuerzo de las ayudas al autoconsumo integradas dentro del Plan de Recuperación y creemos que están siendo determinantes para que lograr el objetivo de la Hoja de Ruta del Autoconsumo que establece una estimación de penetración de entre 9 GW (en un escenario tendencial) y 14 GW para 2030.”
Desde la Fundación Renovables son incluso más optimistas y creen que “con estos precios de la electricidad, la amortización de la instalación ha pasado de 8 a 5 y 4 años, e incluso si hay bonificaciones fiscales pueden llegar a los 3 años en algunas localizaciones con más irradiación solar. La subida va a ir a más indudablemente, dejando por debajo incluso los 14 GW de objetivo que plantea la Hoja de Ruta del Autoconsumo”.
También están de acuerdo desde APPA Renovables: “en la actualidad hay del orden de 2,5 GW de potencia en instalaciones de Autoconsumo en nuestro país y en un escenario conservador se superarían con facilidad los 11 GW, por lo que el desarrollo actual del Autoconsumo estaría por delante de las previsiones más optimistas.
Según la información facilitada por las empresas, y recopilada por APPA Renovables, el sector residencial lideró el crecimiento porcentual durante el pasado año. En total, particulares y empresas instalaron 1.151 MW, rompiendo la cifra psicológica del gigavatio y casi duplicando los 623 MW instalados en 2020. Desde 2017, la potencia anual instalada ha experimentado fuertes crecimientos, multiplicándose por diez en los últimos cuatro años.
En total, particulares y empresas instalaron 1.151 MW, rompiendo la cifra psicológica del gigavatio y casi duplicando los 623 MW instalados en 2020. Desde 2017, la potencia anual instalada ha experimentado fuertes crecimientos, multiplicándose por diez en los últimos cuatro años
Los retos que aún no se han conseguido
Pese a todo el crecimiento, también hay algunas sombras. Desde APPA Renovables, nos señalan que “para que esta forma de generación alcance todo su potencial es necesario avanzar en homogeneizar la normativa fiscal, seguir simplificando los trámites administrativos, hacer cumplir los plazos a los distintos actores o ampliar la limitación actual de 500 metros entre generador y consumidor en autoconsumo compartido”.
Desde la Fundación Renovables se muestran de acuerdo. “Lo que es necesario desde hace años, tras el RDL 244/2019, es avanzar en el autoconsumo colectivo para edificios, aligerar barreras y trámites administrativos que ahora lastran y retardan hasta 5 meses la legalización de las instalaciones, mejorando la distancia de 500 m entre los puntos de conexión y consumo y avanzar en la elaboración de los coeficientes dinámicos de los excedentes. Si solventamos estas trabas, el autoconsumo es imparable y permitirá situar a las personas en el centro del sistema eléctrico”. Y añaden otro punto a mejorar. “Hay un cuello a día de botella hoy en día en la poca oferta de instaladores. “Es necesario fomentar la formación profesional y centros de formación para dar una salida laboral a muchos jóvenes en un mercado de futuro y que permita al autoconsumo avanzar a un ritmo estable a la vez que crea empleo local con un elevado valor distribuido”.
Las firmas internacionales ya están aquí
Hay negocio creciente y las empresas lo saben. Las internacionales también. Algunas han tomado ya muy buenas posiciones, como el es caso de Otovo, la compañía noruega especializada en instalaciones para el autoconsumo fotovoltaico residencial, que acaba de presentar los resultados del primer trimestre de 2022 donde se han registrado cifras de negocio récord impulsadas por el fuerte crecimiento de la demanda en medio de la escalada de precios de la electricidad en Europa. En concreto, en España ha incrementado sus ventas en un 138% respecto a las cifras registradas el mismo trimestre del año anterior y supera ya los 3.000 clientes en todo el país. Especialmente significativo, señalan, es el aumento de las instalaciones que incorporan baterías al pasar del 14% al 27% del total de los contratos suscritos en España. Esta opción crece en los últimos meses por el bajo precio con el que el mercado compensa los excedentes producidos por los paneles solares y el precio de compra de la electricidad, aunque aún se prevé un continuado crecimiento en la adquisición de baterías, donde España se encuentra todavía por detrás de los porcentajes que registran otros países de nuestro entorno como Alemania (85%) e Italia (69%). Por otro lado, España es el lugar donde el alquiler del sistema tiene una mayor penetración entre los países en los que opera Otovo hasta convertirse en la opción mayoritaria. En opinión de Íñigo Amoribieta, CEO de la compañía en España, “esta modalidad evita al cliente la inversión que supone la compra de la instalación, ofrece ahorros desde el primer día y hace que el cliente pueda despreocuparse de la instalación durante los 20 años de vida útil de la misma. Esta opción permite además poder comprar los paneles solares instalados cuando se desee sin recargo alguno y con la máxima flexibilidad”.