Nuria Díaz
El tiempo corre y al grupo australiano IFM apenas le quedan un par de semanas para lograr hacerse con un 17% de Naturgy y dos asientos en su Consejo de Administración. Después de que los principales accionistas, los fondos GVC y GIP y Criteria hayan ratificado que no están dispuestos a vender su parte, los australianos capitaneados en España por Jaime Siles tienen centrados todos sus esfuerzos en informar, y con suerte convencer, al 30% de los socios minoritarios, unos 70.000 accionistas, desde inversores institucionales hasta pequeños ahorradores, de que acudan a la oferta que vence el próximo 8 de octubre. Los analistas se dividen entre quienes apuestan por el triunfo de la operación y los que creen que pinta muy difícil.
El presidente de Naturgy, Francisco Reynés se fue de vacaciones con una opa no deseada encima de la mesa y un nuevo plan estratégico echando a rodar. Por si fuera poco, a la vuelta le esperaba un decreto del Gobierno para atajar la inusitada subida de la luz, que le duele directamente en la cuenta de resultados y que aún no está claro en qué medida afecta a los dos asuntos anteriores. ¿Quién da más?
Por el momento, lo más urgente, una vez que ha pasado el ‘calentón’ post decreto y los recursos judiciales, si los hubiera, llevaran un tiempo es ver el final de la OPA australiana que vence el próximo 8 de octubre. ¿Qué ha pasado de nuevo? Lo último, que hace unos días, el consejo de administración de Naturgy se reunía y tras señalar que considera “razonable” el precio de 22,07 euros ofrecidos, también remarcaba que ninguno de los consejeros que poseen acciones de la energética tienen intención de aceptar la oferta. “En realidad eso no es una novedad, señala una fuente del sector. Los australianos no esperaban que lo hicieran”. ¿La razón? Esta fuente señala que estos consejeros tienen ligados sus incentivos a un plan de acciones hasta 2023. O sea que, si quieren cobrarlo, no van a vender”. Los consejeros que poseen acciones de Naturgy a título individual son el propio Francisco Reynés, Ramón Adell, Enrique Alcántara, Francisco Belil, Javier de Jaime, Isabel Estapé y Pedro Sáinz de Baranda.
Para conseguir sus objetivos el grupo australiano pretende centrarse en el 30% de ‘free float’, dentro del cual, en torno al 10% del capital está en manos de minoristas y el otro 20%, de grandes inversores institucionales
Por otro lado, los dos principales fondos de inversión del capital, CVC y GIP, y cada uno con algo más del 20%, ya se comprometieron hace meses a no acudir a la oferta para que hubiera más espacio para los pequeños inversores y no hubiera que recurrir al prorrateo a la hora de repartir. Criteria Caixa (25%) no parece tener ninguna intención de vender porque de hecho hasta el pasado mes de julio habría invertido unos 100 millones en reforzar su participación.
Así las cosas y para conseguir sus objetivos el grupo australiano pretende centrarse en el 30%, dentro del cual, en torno al 10% del capital está en manos de minoristas y el otro 20% está en manos de grandes inversores institucionales. Constituyen el free float que le permitiría alcanzar el 22% previsto o el 17% que ya han dicho, por activa y por pasiva, que es el límite que aceptarán. Para ello, según confirman a El Nuevo Lunes fuentes financieras, el fondo IFM ha contratado al proxy solicitor Georgeson para que encuentre e informe a los 73.000 accionistas de Naturgy de las condiciones de su oferta. “En el fondo es un procedimiento que, si no es obligatorio, si es valorado por los reguladores”. Su misión será buscar a los accionistas, especialmente a los institucionales, unos 200 fondos de inversión, para darles información y sondear quienes están dispuestos a vender.
¿Una prima a cambio de los dos consejeros?
En los últimos días, se ha especulado con la posibilidad de que el fondo estuviera dispuesto a rebajar sus pretensiones iniciales del 17% al 10%, pero fuentes del sector creen que no es probable. “Lo que ocurre, explican, es que el 10% el umbral mínimo que fijan los alrededor de 30 bancos que le proporcionarán financiación por un máximo de 1.942 millones. Los bancos que han depositado los avales para financiar la operación son: BNP Paribas (2.608 millones), Banco Santander (1.000 millones), CaixaBank (328 millones), Banco Santander (328 millones), BBVA (150 millones); Intesa Sanpaolo (116 millones), ING (98 millones), MUFG Bank (77 millones); UniCredit (51 millones); Credit Agricole (51 millones), Kutxabank (30 millones), Credit Suisse (26 millones), HELABA (26 millones), Liberbank (13 millones), Banco Cooperativo Español (11 millones) y Bankinter (9 millones).
Junto al 17%, a lo que no parecen dispuestos los australianos es a renunciar a los dos consejeros a los que, señalan, les da derecho ese capital, si lo alcanzan, dado que la proporcionalidad imperante suele dar un consejero por cada 6% de capital
Junto al 17% a lo que no parecen dispuestos los australianos es a renunciar a los dos consejeros a los que, señalan, les da derecho ese capital, si lo alcanzan, dado que la proporcionalidad imperante suele dar un consejero por cada 6% de capital. Sin embargo, en su escrito tras el consejo de administración de la pasada semana, Naturgy alerta que “existe incertidumbre” sobre la posibilidad de ejecutar las intenciones de IFM relativas a la solicitud de tener dos consejeros dominicales, sin aumentar el tamaño del consejo, lo que obligaría a reducir el número de consejeros independientes. En opinión del propio consejo, tal circunstancia dificulta el cumplimento de las recomendaciones de buen gobierno corporativo que establece la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Dos consejeros le otorgarían una posición de “influencia significativa” que supondría el pago de una prima.
Hay análisis para todos los gustos, pero reina la incertidumbre. Según el analista de Renta 4, Ángel Llamazares “en estos momentos es difícil de saber cómo va a terminar la OPA, pero creemos que la probabilidad de que no se alcance el mínimo del 17% para el éxito de esta se ha incrementado por el hecho de que IFM en su último folleto dejó la puerta abierta a que pudiese estar por debajo de ese 17%, hecho que nos lleva a pensar que no las tiene todas consigo junto con su negativa previa a incrementar el precio de la acción. Además, ha fijado un periodo de suscripción de 30 días cuando lo más habitual es que sea de 15”. Por otro lado, hay analistas que ven en las medidas del Gobierno, incluso, un acicate para la venta y el triunfo de la OPA. En dos semanas, lo sabremos.
El fondo australiano quiere cero emisiones en 2050
Y en medio de la opa, el gestor de fondos de pensiones australiano ha anunciado que reducirá en más de un millón de toneladas métricas de CO2 sus emisiones antes de 2030. Esta medida, que forma parte de su plan de alcanzar cero emisiones netas en 2050, supondrá reducir en un 40% las emisiones de la actual cartera de infraestructuras, medido a partir de los niveles difundidos en 2019. Por ello ha adoptado un conjunto de medidas adicionales que aplicará en todos sus activos de infraestructuras y que tiene que ver también con su opa sobre Naturgy. Por ejemplo, ha señalado que mejorará los procesos de toma de decisiones que ayudarán a garantizar que las nuevas adquisiciones estén alineadas con el objetivo de cero emisiones para 2050 y que hayan considerado la transición al cambio climático. Y también que irá eliminará gradualmente el carbón térmico para 2030 y no realizará nuevas inversiones en activos que obtengan ingresos importantes del carbón térmico.
Kyle Mangini, jefe Global de Infraestructuras de IFM Investors, ha insistido en el largo plazo como factor clave de sus inversiones. También lo han repetido en el caso de Naturgy, de ahí su insistencia en tener dos consejeros. «Esperamos seguir colaborando estrechamente con nuestras empresas participadas mientras abordamos juntos la transición energética”.