El Banco de España ha renovado la designación de Banco Santander como la única entidad española de importancia sistémica mundial (EISM) en 2023, una categoría en la que se encuentra desde el 1 de enero de 2016, según ha anunciado el supervisor bancario a través de un comunicado. El banco presidido por Ana Botín ha obtenido una calificación de 192 puntos básicos en la metodología del Comité de Basilea que se utiliza para identificar a las EISM, por lo que estará sujeto a un requerimiento adicional de capital de nivel 1 ordinario, equivalente al 1% de su exposición total al riesgo en base consolidada. El supervisor explica que este colchón de capital tiene como objetivo principal mitigar los efectos sistémicos adversos que este tipo de entidades puede ocasionar eventualmente al sistema financiero mediante el reforzamiento de su capacidad de absorción de pérdidas.
Además, contribuye a incentivar una «prudente» asunción de riesgos y a compensar la posible ventaja competitiva de este tipo de entidades en los mercados de financiación debido a su relevancia sistémica. La metodología desarrollada por el Comité de Basilea estima la importancia sistémica mundial de una entidad a partir de variables relacionadas con su actividad y modelo de negocio (en concreto, el tamaño por volumen activos, la sustituibilidad y complejidad de los servicios prestados, las interconexiones con otras entidades financieras, así como el volumen de su actividad internacional) en relación con las mayores entidades bancarias a nivel mundial.
El colchón de capital efectivo exigible a Santander en 2023 como entidad de importancia sistémica será el mayor entre el presente colchón EISM y el colchón que más adelante será fijado para esta entidad en su condición de otra entidad de importancia sistémica (OEIS) para dicho ejercicio.