Las reclamaciones relacionadas con tarjetas que los ciudadanos han presentado al Banco de España continúan al alza y en 2020 ya superan a aquellas relativas a cuentas y depósitos, situándose solo por detrás de las reclamaciones hipotecarias. Así lo refleja la última estadística del servicio al ciudadano del Banco de España, que recoge datos hasta septiembre de 2020. Las tarjetas ya fueron la categoría que más creció en reclamaciones durante el año 2019 (+40,1%), colocándose en tercer lugar, al aglutinar el 17,9% del total, frente al 9,5% que representaban en 2018. Dicho aumento, según explicó el Banco de España, respondió al crecimiento de las reclamaciones sobre operaciones fraudulentas y sobre las tarjetas ‘revolving’. Entre enero y septiembre se produjo un nuevo incremento, de manera que las reclamaciones por tarjetas alcanzan ya el 24,44% del total de quejas presentadas por ciudadanos al organismo supervisor. Aunque el Banco de España todavía no ha detallado a qué se debe el aumento, cabe recordar que en marzo el Tribunal Supremo se pronunció sobre la usura en los contratos de tarjetas ‘revolving’ con intereses superiores al 20%. Por delante de las tarjetas y a poca distancia ya solo se mantienen las reclamaciones hipotecarias, con el 26,9% del total (en 2019 representaron el 30,6% y en 2018 más del 70%), mientras que las reclamaciones por cuentas y depósitos han pasado a una tercera posición, con el 23,8% de las reclamaciones, pese a que esta cuota ha crecido en más de cuatro puntos respecto al conjunto de 2019.