Mapfre registró un beneficio neto de 488 millones de euros durante los nueve primeros meses de este año, lo que supone un descenso del 6,9% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, según ha informado este viernes el grupo asegurador. La hiperinflación lastra 52 millones al beneficio, que, sin este efecto, habría crecido más de un 1,3%, hasta 540 millones de euros. Entre enero y septiembre, los ingresos aumentaron un 12,2%, hasta alcanzar los 22.202 millones de euros, mientras que las primas ascendieron a 18.644 millones de euros, lo que supone un incremento del 12,1%, con crecimiento en prácticamente todos los países en los que el grupo opera y en los principales ramos del negocio. La evolución de las primas en bases homogéneas, es decir, sin los efectos de la prima bienal de México y la salida de Bankia, y sin el impulso de las divisas, que aportan 5,5 puntos porcentuales al crecimiento, habría sido de un 10,6%, es decir, un aumento también de dos dígitos en el negocio, según destaca la compañía. Por regiones, Mapfre ha destacado la aportación de Iberia, con casi 300 millones de euros, y el «buen» resultado de Latinoamérica, en el que destacan Brasil y Perú. Por ramos, la compañía ha explicado que el aumento del beneficio de los segmentos de Seguros Generales y Vida Riesgo, con una siniestralidad por Covid que pierde relevancia en todos los países, ha mitigado «parcialmente» la evolución del ramo de automóviles, afectado por la recuperación de la movilidad tras el Covid y el actual escenario de inflación.