El BBVA ganó 3.311 millones de euros entre enero y septiembre, frente a las pérdidas de 15 millones de euros que registró en el mismo periodo de 2020 por el deterioro de 2.084 millones que tuvo que aflorar en el fondo de comercio de su filial en Estados Unidos. La mejora del resultado se ha basado principalmente en las menores provisiones para afrontar pérdidas futuras (-46%), después de las dotaciones extraordinarias realizadas el año pasado por la pandemia.
El banco destaca que solo en el tercer trimestre, el beneficio atribuido fue de 1.400 millones, “uno de los más elevados de la historia”. Este resultado se apoya en los ingresos de la actividad comercial y, sobre todo, en la fuerte caída de los saneamientos crediticios ya citada, por la mejoría de la situación económica. El grupo eleva la generación de capital (+31 puntos básicos desde junio) y presenta un ratio de capital CET 1 fully loaded, el de mayor calidad, del 14,48% a cierre de septiembre.
En España el beneficio atribuido hasta septiembre fue de 1.223 millones de euros, un 161% más interanual. Los ratios de mora y cobertura también mejoraron en el trimestre, situándose en el 4,1% y el 66%, respectivamente, gracias a la reducción de los dudosos.
Los gastos de explotación se incrementaron (+6,5% en términos interanuales) en todas las áreas a excepción de España. Este crecimiento, según la entidad, se enmarca en un entorno de recuperación de la actividad y elevada inflación, especialmente en México y Turquía.