En la última reunión de CaixaBank con los sindicatos para la negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) por la fusión con Bankia, la dirección rebajó a 6.950 los despidos, 450 menos que en la última propuesta. Supone una reducción del 16% o de 1.341 bajas respecto a las planteadas en el inicio de la negociación (8.291 salidas).
Además, el banco también mejoró de forma generalizada las condiciones económicas de las salidas para primar la voluntariedad. El banco elevó del 56% al 57% del salario fijo la renta para las prejubilaciones desde los 56 años y hasta los 63 años. El ERE por la integración de Bankia será el mayor en la historia de la banca española. Además de los despidos, la entidad plantea 686 recolocaciones en varias filiales tecnológicas y de servicios especializados del grupo. El plan es cerrar 1.534 oficinas, el 27% de la red combinada en España.
La entidad también mejoró la indemnización para los empleados de entre 52 y 53 años que decidan acogerse al ERE. Ahora ofrece una indemnización de pago único correspondiente al 53% del salario fijo (frente al 52% anterior) multiplicado por seis.
Para la plantilla de menos de 52 años, la dirección de CaixaBank mantiene la propuesta de indemnización de 35 días por año trabajado, con un límite de 24 mensualidades. Y sube las primas por acogerse al ajuste a 7.500 euros para los empleados con más de 10 años de antigüedad.