N. L. ■
Acercar la economía y las finanzas a los colectivos más vulnerables es fundamental para derribar barreras y mejorar la calidad de vida.
En algunas ocasiones, no es fácil comprender el farragoso lenguaje financiero. “Nos hemos propuesto el reto de que las finanzas y los mortales se conozcan para, a partir de ahí, poder entenderse puesto que los dos se necesitan mutuamente. Que ese mundo técnico, serio y solo para unos pocos se acerque a todos nosotros. Queremos que cualquier persona entienda de qué se habla en las noticias, en la política, qué le están diciendo cuando va a pedir un préstamo o de qué depende una hipoteca. Es más, no sólo queremos que lo entienda, sino también que se atreva a preguntar sobre ello y a opinar”, explican los responsables de Finanzas para Mortales (FxM), el programa de educación financiera que imparten por toda España voluntarios del Banco Santander desde hace más de diez años.
Banco Santander tiene una estrategia clara en pro de la inclusión financiera, en el marco de sus compromisos de banca responsable, y ya supera los 9 millones de personas empoderadas financieramente desde 2019. El objetivo es alcanzar los 10 millones en 2025
El objetivo es acercar el mundo de la economía a los colectivos más vulnerables: personas mayores, mujeres inmigrantes, niños, discapacitados, internos en centros penitenciarios y otros grupos en riesgo de exclusión. Entender los conceptos básicos de forma clara permite gestionar la economía cotidiana y acceder a los servicios financieros de manera adecuada en función de las necesidades personales. Desde cómo planificar la jubilación, manejar la contabilidad doméstica, aprender a controlar los gastos o algunos trucos para ahorrar; hasta temas más especializados para adentrarse con más confianza en el mundo de las finanzas.
Según el Banco de España, “la educación financiera va más allá de la mera disponibilidad de información y se extiende a los conocimientos, conductas y actitudes que nos permiten tomar decisiones financieras acertadas a lo largo de la vida, tener hábitos financieros saludables y conocer las oportunidades y riesgos de los productos financieros que contratamos (cuentas, tarjetas, créditos, hipotecas…”.
Banco Santander tiene una estrategia clara en pro de la inclusión financiera, en el marco de sus compromisos de banca responsable, y ya supera los 9 millones de personas empoderadas financieramente desde 2019. El objetivo es alcanzar los 10 millones en 2025. La educación financiera, junto con al acceso y la financiación, es una de las bazas de la entidad para nadie se quede atrás. Esta labor le ha valido el galardón como Banco del Año en Inclusión Financiera por la revista The Banker. La publicación especializada reconoce las iniciativas de la entidad en banca responsable y sostenible para atender “a personas y empresas sin acceso a servicios financieros con su iniciativa global Finanzas para Todos, un conjunto de servicios integral que combina la digitalización con la educación financiera”, según señala la publicación.
En los últimos tres años, el grupo ha promovido decenas de iniciativas de educación financiera que han beneficiado a 2,6 millones de personas, gracias a programas que incorporan a empleados voluntarios de la entidad y colaboraciones con otras instituciones y ONG para acercar la cultura financiera básica a colectivos vulnerables. Solo en 2021, el Santander desarrolló cerca de 80 iniciativas de relacionadas con esta materia en los países donde opera, a través de talleres y cursos presenciales, y también con formación online en webs específicas, herramientas, tutoriales o juegos.
En el caso de España, el portal de Finanzas para Mortales tuvo el año pasado más de 290.000 visitas y consultas. Además, en el primer semestre de este año, más de 5.000 personas de colectivos financieramente vulnerables se han beneficiado de las numerosas sesiones formativas que desarrolla este programa. Una de las más recientes se ha celebrado en noviembre junto a la Universidad de Salamanca. Más de 300 estudiantes salmantinos de ESO, Bachillerato y enseñanzas de Grado Medio procedentes de diferentes institutos y colegios se dieron cita en la Facultad de Economía y Empresa de esta institución.
Además, junto con la organización Plena Inclusión, ha lanzado la Guía Finanzas para Mortales para personas con dificultades de comprensión. Con un método de lectura fácil, esta publicación permite conocer no sólo conceptos financieros sino cómo manejar la banca digital y moverse por las redes de forma segura.
La educación financiera, junto con al acceso y la financiación, es una de las bazas de la entidad para nadie se quede atrás
Para Lara de Mesa, directora global de Banca Responsable de Banco Santander, “la educación financiera es una palanca clave para favorecer la inclusión financiera, que contribuye de manera directa a siete de los 17 ODS de Naciones Unidas para 2030 y a que personas, empresas y la sociedad en su conjunto prosperen”. Por esta razón, el Santander ha extendido sus proyectos, además de España, a otros nueve países de Europa, Latinoamérica y Estados Unidos. Por ejemplo, los podcasts Tempo é Dinheiro en Portugal; las iniciativas que ofrece Tuiio en México; el programa Finansiaki destinado a la población infantil en Polonia; o la plataforma Sanodelucas, que ayuda a la alfabetización financiera en Chile.
Combatir la brecha digital de los mayores
La nueva era tecnológica ofrece sin duda numerosas ventajas. En el caso de los bancos, permite llevar los servicios financieros a cualquier rincón del mundo. La banca digital ha traído consigo una nueva forma de relacionarse con el cliente. Sin embargo, ¿cómo incluir a todos aquellos que por edad se enfrentan con dificultad a esta experiencia virtual? En España, hay más de nueve millones de personas dentro del llamado colectivo senior, que incluye a los mayores de 65 años. La formación y el asesoramiento son esenciales para guiarles en el uso de estas nuevas herramientas.
Banco Santander ha puesto en marcha este año los talleres Finanzas para Mortales edición Senior, que ofrecen formación relacionada con la transformación digital que están experimentando diversos sectores socio económicos y numerosos trámites de la vida cotidiana. Esta iniciativa ha emprendido un recorrido por distintas comunidades del país. Tras una veintena de talleres piloto bajo el lema “Entendiéndonos con la banca digital” en la Comunidad de Castilla y León, el pasado mes de junio voluntarios del Santander impartieron 33 nuevas sesiones (18 en capitales de provincia y 15 en poblaciones rurales de entre 300 y 5.000 habitantes) para llevar la educación financiera básica a este colectivo vulnerable. Los cursos seguirán ampliándose en los próximos meses.
En estos talleres se abordan temas de ciberseguridad, como las principales estafas y fraudes, la prevención ante ciberdelincuentes, o consejos para una vida digital segura. También abarcan formación básica sobre banca digital: los distintos canales y cómo utilizarlos, las claves de acceso e identificación; o prácticas de navegación por la app y la web. Además, se ponen sobre la mesa otros asuntos, entre ellos el uso de los cajeros automáticos y de Correos Cash.
En noviembre, la Universidad de Valladolid y Banco Santander han firmado un acuerdo de colaboración para extender la iniciativa de “Educación financiera para Mayores”, que se articulará a través de los programas universitarios que desarrolla esta institución académica. También ha sellado un acuerdo con la Fundación Comillas del Español y la Cultura Hispánica y la Fundación UCEIF, para facilitar formación en cultura financiera y banca digital a mujeres mayores de 60 años residentes en entornos rurales de menos de 1.000 habitantes. Estos talleres han comenzado en el municipio de Cabuérniga (Cantabria).
Otro de los ejemplos es la colaboración con la Universidad de Alicante en el proyecto DEFINE, una iniciativa cofinanciada por el Programa Erasmus + de la Unión Europea. Bajo el título “Educación financiera digitalizada para personas mayores: soluciones de juegos de escenarios interactivos para aumentar la alfabetización financiera en línea de las personas mayores”, el objetivo es aumentar la alfabetización financiera de todos aquellos que no están familiarizados con las nuevas tecnologías para que puedan manejar la banca digital, disfrutar de las oportunidades que ofrece y evitar fraudes.
Un recorrido por los centros penitenciarios españoles

La educación financiera se ha convertido en una de las llaves para abrir la puerta a un futuro de oportunidades. También para las personas privadas de libertad en los centros penitenciarios. Más de 300 internos e internas de diversas cárceles españolas han recibido formación financiera de la mano de Finanzas para Mortales – Justicia Educativa, que nació a mediados de 2021. Este programa, puesto en marcha a mediados de 2021 por BancoSantander en colaboración con Instituciones Penitenciarias (IIPP), acerca los conceptos de economía básicos para el día a día a este colectivo para colaborar en su proceso de reinserción social cuando emprendan un nuevo capítulo en sus vidas.
El programa ya ha recorrido centros como el de Burgos, Picassent (Valencia), Teixeiro (A Coruña), El Dueso (Cantabria), Madrid (Alcalá-Meco), Sevilla II, A Lama (Pontevedra), Mahón (Menorca), Torredondo (Segovia) o Daroca (Zaragoza), estos dos últimos los más recientes.
“Son sesiones formativas, impartidas por voluntarios del Santander para facilitar educación financiera básica para la inclusión de las personas privadas de libertad, que dote a los internos e internas de los conocimientos económico-financieros suficientes que les permitan tomar decisiones personales y familiares sobre sus finanzas cotidianas de una forma responsable e informada”, explica Lorente, que imparte estos talleres en el centro penitenciario de Picassent.
El taller se realiza habitualmente en dos jornadas. La primera está dedicada a las posibles salidas laborales de los participantes, con temas como las ayudas y prestaciones; diferencias entre ser autónomo, trabajar por cuenta propia o por cuenta ajena; o la comprensión de una nómina y de una factura. La segunda sesión, denominada ‘Aprender a organizarse’, centra su contenido en aspectos claves del día a día de una persona o negocio. Por ejemplo, los productos financieros básicos, el uso de la banca online, la ciberseguridad, los métodos de ahorro, el endeudamiento y el consumo inteligente, el presupuesto personal y familiar, o la gestión de las deudas.
Para Banco Santander, “este es un proyecto inclusivo que forma parte del compromiso que mantenemos con la inclusión financiera en todos los países en los que trabajamos, para lograr que todas las personas que se encuentran en una situación financieramente vulnerable adquieran los conocimientos necesarios sobre la cultura financiera actual para ayudarles a tomar las mejores decisiones sobre la administración y protección de sus recursos económicos”.
Recientemente, el banco ha presentado en México una iniciativa similar a través de Tuiio, uno de los programas estrella de inclusión financiera en Latinoamérica. En colaboración con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), brindan educación financiera a mujeres presas en el Centro Femenil de Santa Martha Acatitla, en el marco del programa “De vuelta a la comunidad”. Tuiio ha atendido en los últimos años a más de 375.000 clientes, de los que un 98% son mujeres.