El consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bueno, ha afirmado este miércoles que no tienen intención de hacer ajustes extraordinarios de personal al menos hasta 2023, cuando finaliza el actual plan estratégico. «Hemos hecho una reducción del 22% de la plantilla y del 25% de las oficinas en un plazo inferior a 15 meses, con el primer plan de reestructuración a principios de 2021 y el que estamos terminando», ha detallado. González-Bueno considera «sustancial y modélico» este plan, porque se ha producido sin interrupción de la calidad de servicio, con tensión comercial y con crecimiento del 6% del volumen de activo durante 2021. El consejero delegado también ha afirmado que la gestión rigurosa del riesgo y el control de la morosidad seguirán siendo «foco de atención preferente» para la entidad. Durante la junta de accionistas del banco en el Auditorio de la Diputación de Alicante, ha recordado que cierran 2021 con un balance saneado: «Ha sido un año muy positivo». También ha dicho que afrontan 2022 con un enfoque internacional de desapalancamiento y foco en la rentabilidad, con el objetivo de que sus negocios sean más eficientes en términos de capital. «En 2021 ya se han visto resultados en este sentido; por ejemplo, la venta de BancSabadell Andorra y la reducción del volumen de crédito», ha añadido. El CEO ha recordado además que el objetivo de la entidad es alcanzar una rentabilidad (ROTE) del 6% a finales de este año, cuando inicialmente estaba previsto para 2023, según el actual plan estratégico.