Al Grano / Mercedes Cobo
“Creo que aún existe margen para proteger el empleo a futuro y, máxime, cuando los fondos de la UE están cerca de llegar en España”, considera Lacaci. Opina que los fondos suponen una gran oportunidad pero cree que depende de cómo se gestionen “y de que se ejecute una política fiscal que incentive el consumo, con contención de la carga impositiva fiscal y, a su vez, con políticas de gasto público con inversión en sectores estratégicos para España, pensando en la creación de puestos de trabajo a futuro”.
¿Cómo han vivido desde su despacho este año de pandemia? ¿En qué momento se encuentran?
La crisis sanitaria a consecuencia de la pandemia por el Covid_19 ha sido devastadora a todos los niveles y, sin duda, ha afectado de forma negativa a casi todos los sectores económicos de la práctica totalidad de los países en el mundo.
En nuestro caso, en el despacho Lacaci & Delgado Abogados, la pandemia ha tenido un impacto desigual, dentro de nuestras diferentes áreas de la actividad jurídica que desarrollamos. Gracias a que formamos un despacho multidisciplinar, hemos podido compensar las áreas que se vieron más afectadas por el parón de la actividad empresarial, sobre todo tras el primer estado de alarma decretado por el Gobierno, como fue el área civil y mercantil, viéndose reforzadas otras áreas, como la de laboral, por el enorme incremento en los expedientes de regulación temporal de empleo, despidos, modificaciones sustanciales en las condiciones de trabajo, etc., como también, en el área de familia, con un importante incremento, sobre todo, de consultas referidas a incumplimientos de las medidas paterno filiales. Incluso en el área penal, hemos tenido incremento de trabajo, al tener que asistir a más detenidos por temas relacionados con desobediencia a la autoridad y otros delitos del ámbito familiar.
“Estamos ante el esperado rebote con una estabilización de la economía, para no tener que volver a medidas excepcionales como las de los ERTEs”
En el momento actual todo parece ir volviendo, poco a poco, a los tiempos pre-Covid, si bien, ahora, notamos un incremento de cuestiones litigiosas que se originaron, precisamente, en las peores etapas de la pandemia. Me refiero, por ejemplo, a los despidos colectivos y concursos de acreedores, en el ámbito laboral y mercantil; o a los divorcios, en el área de familia.
Los abogados que trabajamos en el bufete Lacaci & Delgado también nos hemos sabido adaptar a los nuevos tiempos Covid, ahora estamos más preparados que antes para llevar a cabo las reuniones telemáticas, tener más presencia en las redes sociales, para dar respuesta a un mayor número de clientes potenciales o colaborar de forma más estrecha en los medios, ofreciendo nuestros análisis jurídicos sobre cuestiones diversas de interés y actualidad.
El incremento del número de concursos de acreedores sigue latente…
Efectivamente, más que latente, empiezan a estar muy presentes. Desde nuestro despacho ya avisamos hace meses sobre la posibilidad de que muchas empresas no iban a poder superar la crisis económica derivada de la pandemia, dijimos que los cierres y las restricciones obligadas por los estados de alarma, en muchos sectores, se iban a llevar por delante a muchos autónomos y pymes, e incluso, a alguna gran empresa. En nuestra opinión ha habido y sigue habiendo carencia de ayudas gubernamentales directas para esos autónomos y pymes que no podrían mantenerse en pie únicamente con préstamos o aplazamiento de algunos tributos y, por desgracia, así parece que está siendo.
No obstante, también somos positivos en cuanto a la posibilidad de que exista un crecimiento importante de la actividad económica y del consumo, lo cual conduciría a frenar algunos de los concursos de acreedores que aún no se hubieran iniciado, aunque todo dependerá de cómo evolucione la pandemia y del impacto que tenga la vacunación respecto a la inmunidad de la población frente al Covid_19
¿Han aumentado las consultas para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad?
Efectivamente, lo mismo que ha ocurrido con el incremento de las consultas referidas a las empresas sobre la posibilidad de plantear concursos voluntarios de acreedores, ha habido muchos autónomos e incluso algunos particulares que también han acudido al despacho para asesorarse sobre la opción de acogerse a la denominada como Ley de segunda oportunidad (Ley 25/2015, de 28 de julio, de mecanismo de segunda oportunidad, reducción de la carga financiera y otras medidas de orden social).
No obstante, sobre este tema, lo primero que siempre vemos con quienes pretenden acogerse a esta ley para intentar superar la difícil situación económica por la que atraviesan es si cumplen o no con los requisitos mínimos legalmente exigidos a tal fin. Obviamente, no todos los particulares ni autónomos que atraviesan por dificultades económicas pueden acogerse a la Ley de segunda oportunidad y lo primero que hacemos, como digo, es una labor de análisis individualizado de cada caso concreto. Existe bastante desconocimiento sobre este mecanismo legal y en muchas ocasiones hay personas físicas o autónomos que sí podrían acogerse al mismo, pero por desconocimiento, no lo hacen. En cualquier caso, estimamos que habrá un incremento de los procedimientos judiciales en los próximos meses sobre este asunto.
¿Qué problemas han encontrado con los ERTEs?
Fundamentalmente han sido problemas burocráticos. En el primer momento de la pandemia, tras el primer estado de alarma y las posteriores medidas económicas decretadas por el Gobierno, hubo una avalancha de solicitudes de suspensión de las relaciones laborales de los trabajadores. En este primer momento, la Administración se vio colapsada y hubo muchos problemas referidos a la propia tramitación de los expedientes y, en muchos casos, incluso con retrasos en los pagos a los trabajadores por parte del SEPE. También existieron casos en los que las empresas no cumplían con todos los requisitos que se establecieron en los decretos legislativos y, en esos casos, fueron obligadas a devolver las cantidades que se les había exonerado por el pago de las cuotas de la Seguridad Social a los trabajadores.
“Habría que haber incidido más en las ayudas directas, que han brillado por su ausencia”
Afortunadamente, pasados los primeros meses de confusión y del mayor colapso de la Administración, este tema fue mejorando y, aunque aún hoy existen algunos casos puntuales que requieren de solución, con carácter general, ya no existen mayores problemas.
¿Cómo valora esta medida?
En mi opinión, las ayudas gubernamentales decretadas para los casos de suspensiones temporales de empleo (ERTE), fueron acertadas. Quizá, el punto que considero que pueda causar más tensión es dentro de algunos sectores como el turismo, comercio o la hostelería, en los que la actividad aún se sigue resintiendo y están lejos de sus ratios de actividad precovid. En estos sectores y en algunos otros que también convendría analizar, las ayudas decretadas para el caso de estar en situación de ERTE, deberían contemplarse a más largo plazo, con porcentajes a cubrir por parte del SEPE más elevados que los que se han firmado tras el último estado de alarma. No obstante, todo dependerá de la evolución que siga la pandemia y del efecto de las vacunas para ver si, finalmente, estamos ante el esperado rebote con una estabilización de la economía, para no tener que volver a medidas excepcionales como las de los ERTE masivos que tuvieron en muchas empresas.
¿Qué pasará cuando se termine la prórroga?
Enlazado con lo que acabo de apuntar en la pregunta anterior, todo dependerá de cómo evolucione la crisis sanitaria y el control de los contagios, con la esperada eficacia de la vacunación. Si se logra estabilizar el número de contagiados y, sobre todo, desciende de forma considerable tanto el número de hospitalizados graves, como de fallecidos, entonces la economía podrá recuperarse de una forma rápida, si bien es cierto que, muchas empresas ya se quedaron en mitad del camino y, muchas otras, necesitarán de ayudas más prolongadas en el tiempo para poder subsistir.
En su opinión, ¿qué otras medidas se deberían haber llevado a cabo en términos de protección del empleo?
En mi opinión, habría que haber incidido más en las ayudas directas, que han brillado por su ausencia. Fíjense que la práctica totalidad de las ayudas que se han decretado por parte del Gobierno se han sustentado en ayudas indirectas, moratorias en los pagos de tributos o préstamos ICO a bajo interés, pero con obligación de devolución. Todo este paquete de ayudas, si bien pudiera haber paliado algo la difícil situación económica de algunas empresas, lo cierto es que muchos autónomos y pymes no han podido continuar con sus actividades profesionales, puesto que han sido ayudas insuficientes. Lo anterior, ha significado también, una destrucción de empleo, a consecuencia de las empresas y autónomos con trabajadores a cargo que han tenido que cerrar y, por tanto, despedir a sus trabajadores.
Creo que aún existe margen para proteger el empleo a futuro y, máxime, cuando los fondos de la UE están cerca de llegar en España. Aquí, es donde veo la gran oportunidad que se abre en el horizonte, junto con la recuperación económica por la posible y deseable eficacia de la vacunación frente a la pandemia. Ahora bien, en mi opinión, dependerá, en gran medida, de dos factores importantes: el primero, de que el Gobierno sepa gestionar bien los fondos que nos lleguen de la UE y, en segundo lugar, de que ejecute una política fiscal que incentive el consumo, con contención de la carga impositiva fiscal y, a su vez, con políticas de gasto público con inversión en sectores estratégicos para España, pensando en la creación de puestos de trabajo a futuro.
Antes de abrir el despacho en 2011 trabajó mucho tiempo como consultor empresarial. ¿Cómo ve el panorama económico en los próximos meses? ¿Por dónde vendrá la recuperación de la actividad económica?
Como ya he apuntado a lo largo de esta entrevista estoy convencido de que el futuro económico será positivo, tanto en España, como para las economías de nuestro entorno. De todos modos, no creo que esta recuperación económica se pueda materializar en lo que queda del presente ejercicio, más bien confío en una estabilización en lo que queda de 2021 y una recuperación económica que será más pronunciada en el segundo semestre de 2022
Pienso que la recuperación, sobre todo en España, llegará de la mano de los sectores más tradicionales y sobre los que recae un gran peso del PIB: el turismo, la hostelería y el comercio serán tres de los sectores clave para que la máquina económica vuelva a carburar bien y, de ahí, otros tantos sectores entrelazados también tiren del carro de la recuperación.
Al Timón
Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, Carlos Lacaci es Máster en Práctica Contencioso-Administrativo y Extranjería ICAM y Máster en Práctica Asesoría Jurídico Laboral CEF/UDIMA. Abogado y consultor, Lacaci es socio director del despacho Lacaci & Delgado Abogados, es miembro del consejo asesor en el despacho Cremades & Calvo-Sotelo, y miembro permanente del Comité Organizador del World Law Congress (Worl Jurist Association). Lacaci colabora de forma habitual en diversos medios de comunicación como analista de la actualidad política, económica y jurídica.