Al Grano / Mercedes Cobo ■
“Gravity Wave es un movimiento que nace con el objetivo de involucrar a personas, empresas y gobiernos en la solución de la contaminación de plástico en mares y océanos”, lo que supone transformar el sector del residuo plástico, explica Amaia Rodríguez. Reconoce que se encuentran en un momento de crecimiento pero también de grandes retos: “Hemos multiplicado por dos los ingresos de 2021 en tan sólo cuatro meses de 2022, pero queremos invertir en más equipo, en mejorar el proceso de recogida y la colaboración de los pescadores y en poder transformar más residuo en productos de valor. Nuestro objetivo es poder revalorizar 1.000.000 de kilos de plástico del mar para 2024”.
Se dedican a la limpieza de plásticos del mar y puertos del Mediterráneo… ¿Cómo surgió la idea de crear la empresa?
La idea surge de muchas casualidades, pero la principal motivación de crear una empresa dedicada a la limpieza de plástico del mar y puertos surge a partir de un trauma personal, cuando vivía en China y visité algunos países del Sudeste asiático. Allí encontré islas remotas inundadas de plástico, y supe que tenía que hacer algo, así que comencé a investigar y a entender un poco mejor el problema. Cuando volví a España conté lo aprendido y vivido a mi entorno, especialmente a mi familia y a mi hermano pequeño Julen, que después de muchas conversaciones se contagió de la preocupación y cuando conoció a Lefteris, fundador de una escuela de pesca sostenible donde los pescadores limpiaban plástico me llamó y me propuso montar una empresa social para transformar el plástico del mar en productos de valor.
Yo dejé mi trabajo fijo como directora de marketing y Julen sus proyectos, e emprendimos juntos Gravity Wave.
“Esperamos multiplicar por diez los ingresos de 2021 en este año 2022”
¿Que supone este proyecto?
Gravity Wave es un movimiento que nace con el objetivo de involucrar a personas, empresas y gobiernos en la solución de la contaminación de plástico en mares y océanos. Supone transformar el sector del residuo plástico, una revolución de colaboración entre muchos agentes de la sociedad trabajando en una misma dirección, pero sobre todo supone esperanza y acción sobre la recogida de residuo marino y la circularidad del plástico.
¿Cuáles son sus principales valores?
Nuestros valores son muy claros. La transparencia es nuestra prioridad, la ambición y la curiosidad nos mueven a conseguir nuevos objetivos y plantear nuevos retos, pero sobre todo nos emociona demostrar que es posible crear una empresa que crece económicamente a partir de la limpieza de plástico de mares y océanos y que genera empleo y atrae talento para generar un impacto positivo en el planeta.
¿Qué ofrecen a las empresas? ¿Qué les aportan?
Después de más de un año buscando la propuesta de valor de Gravity Wave y de muchas conversaciones con personas y empresas, entendimos que aportábamos mucho valor a las empresas. De una parte ofrecemos a las empresas limpiar plástico del mar y puertos a través de campañas conectadas con productos. Hemos hecho algunas acciones con marcas que por cada producto vendido limpian 1 kg de plástico del mar. Con otras empresas establecemos un compromiso de limpiar 15.000 kilos de plástico del mar en un año, y otras quieren compensar su huella de plástico.
Y por otra parte comercializamos mobiliario y productos que fabricamos a partir de redes de pesca, lo que nos permite trabajar con diseñadores, arquitectos y empresas de muebles que incluyen nuestros materiales en sus colecciones. No solo les aportamos una historia que contar, sino un acceso a la limpieza de residuo marino de una forma fácil y directa, con un impacto positivo.
¿Sostenibilidad y beneficio empresarial son compatibles?
Absolutamente. Si no invertimos en impacto, no hay futuro, pero lo que más nos ha sorprendido es validar con nuestros clientes que gracias a conectar sus productos con la limpieza de plástico del mar aumentan sus ventas, obtienen más visibilidad en medios de comunicación de manera orgánica, y se posicionan en el mercado como referentes en sostenibilidad. Somos grandes defensores de que un proyecto necesita crecer económicamente para poder aumentar el impacto, y así es como trabajamos y validamos nuestro proyecto con otras empresas.
¿Con quién colaboran?
Colaboramos con cualquier empresa o entidad pública que quiera involucrarse en nuestro movimiento y en el propósito, y que se comprometa a limpiar plástico del mar o utilizar nuestros materiales hechos con residuo marino. Somos muy conscientes de que el problema que tratamos de resolver es muy grande, y necesitamos colaborar con el mayor número de empresas y personas que crean en este proyecto. Hemos colaborado con empresas de muchos sectores diferentes, y eso es lo que nos gusta, cualquier empresa puede tener un impacto positivo en el mar con Gravity Wave.
¿En qué momento se encuentran? ¿Me puede hablar de cifras?
Estamos en un momento muy bonito, pero también con grandes retos. Es un momento de crecimiento, y esto conlleva por una parte más ingresos, pero también más riesgo. Hemos multiplicado por 2 los ingresos de 2021 en tan solo 4 meses de 2022, pero queremos invertir en más equipo, en mejorar el proceso de recogida y la colaboración de los pescadores y en poder transformar más residuo en productos de valor. Nuestro objetivo es poder revalorizar 1.000.000 de kilos de plástico del mar para 2024.

“Nos emociona demostrar que es posible crear una empresa que crece económicamente a partir de la limpieza de plástico de mares y océanos, y que genera empleo”
¿Cuáles son sus previsiones? ¿Cuáles son sus objetivos?
Las previsiones en una startup nunca son ciertas, pero somos optimistas y esperamos multiplicar por 10 los ingresos de 2021 en este año 2022, lo que equivale a poder limpiar 150.000 kilos de plástico del mar este año y desarrollar nuevos productos que puedan llegar a más personas. Además, queremos ser referentes en la solución de gestión de redes de pesca para que no vuelva a caer una sola red más a nuestro mar Mediterráneo.
¿Qué planes tiene de futuro?
Queremos estar en el 100% de los puertos pesqueros apoyando a los pescadores tradicionales, recompensarles económicamente por limpiar residuo marino, desarrollar nuevas vías de negocio y replicar el modelo de Gravity Wave en otros mares y océanos del planeta. Tenemos grandes planes y perseguimos nuestros sueños.
¿Cómo es el modelo de negocio de Gravity Wave?
Es un modelo de negocio que por un lado nos financia la recogida de plástico tanto del mar como de las costas y por otro comercializamos el producto final fabricado a partir del plástico recogido. Nuestro propósito es muy claro, así que reinvertimos los ingresos es seguir limpiando más y más redes y plástico del mar.
Trabajan según los principios de economía circular. ¿Qué tipos de productos están generando y cómo se benefician las empresas?
Estamos generando productos a partir de planchas, que son ideales para fabricar muebles y elementos de decoración, pero las posibilidades son infinitas. Las empresas se benefician de tener acabados únicos hechos a partir de residuo marino y se posicionan como empresas con alternativas sostenibles, reciclables y bonitas, que además cuentan una historia.
¿Tienen dificultades las compañías para encontrar proyectos como el suyo?
Últimamente notamos que la demanda ha subido muchísimo, y es porque no hay tantos proyectos que acompañen a las empresas en su camino a la sostenibilidad. Necesitamos más Gravity Wave y soluciones en la sociedad, por eso tratamos de impulsar el emprendimiento social y que cada vez haya más opciones.
¿Qué importancia le están dando las empresas a la sostenibilidad?
Depende mucho de la empresa, por supuesto que encontramos empresas a las que no les interesa la sostenibilidad, sino cumplir con la RSC y queda mucho por recorrer en este sentido. Pero cada vez nos reunimos con más empresas que creen de verdad que tienen que hacer proyectos de sostenibilidad, y quieren generar un impacto positivo.
Invertir en impacto es invertir en futuro, y cada vez son más personas que lo ven así.
El año pasado cerraron su primera ronda de inversión. ¿Tienen previstas más?
De momento no, queremos ser capaces de generar ingresos suficientes para seguir creciendo este año, y quizás a principios de 2023 hacer una nueva ronda para escalar y conseguir nuestros objetivos, que son muy ambiciosos en cuanto a impacto e innovación. Pero no nos obsesionamos con eso, hay muchas formas de financiarse y nuestra última opción será la venta de equity.
¿Creen que las administraciones apoyan lo suficiente proyectos como el suyo? ¿Qué aspectos se deberían mejorar?
No, de hecho es complicadísimo acceder a ayudas públicas, hay muchos procesos con cientos de trámites burocráticos que sin un experto son imposibles de conseguir. Nos falta ese impulso por parte de la administración desde luego, tienen que pensar en que alternativas como Gravity Wave encuentran el equilibrio entre impacto positivo y crecimiento económico, y eso es invertir en un futuro mejor. Todo es demasiado cortoplacista en este país.
Al Timón
Amaia Rodríguez nació en Tajonar, Navarra, un pequeño pueblo de 200 habitantes, pero es una enamorada del Mediterráneo, donde lleva más de dos años. Cofundadora y CEO de Gravity Wave, ha trabajado en Kendani, plataforma marketplace de pequeñas empresas sostenibles, y en Dulsa como responsable de ventas en el mercado asiático. Ha estudiado en la Universidad Rey Juan Carlos y en Zhejiang University of Finance & Economics, reconoce que tiene un imán con el Sudeste Asiático y con China, y, además de viajar (su próximo viaje será a Cabo Verde), le encanta hacer deporte como el pádel surf, descubrir restaurantes nuevos, juntarse con los suyos y leer.