Mercadona ha decidido ajustar sus precios de venta desde este mes de abril en 500 de sus productos de consumo diario hasta final de año. Según los cálculos de la empresa de capital valenciano, supondrá un ahorro de hasta 150 euros anuales en la cesta de la compra de sus clientes. La bajada de precios de Mercadona se aplicará a alimentos frescos como el pollo o las verduras, en conservas, lácteos, productos de limpieza del hogar, alimentos para mascotas o bebidas, entre otros.
Con esta decisión, Mercadona pretende adelantarse a la bajada de costes, tras comprobar que “lentamente” ya se está produciendo en el mercado, según ha explicado la cadena de supermercados en un comunicado. Esta iniciativa, subraya, se lleva a cabo “sin tocar la calidad de los productos y garantizando la sostenibilidad de toda la cadena alimentaria (proveedores, sector productivo, empresa y trabajadores)”.
El presidente de Mercadona, Juan Roig, admitió durante la presentación de los resultados de la compañía que los precios habían subido “una burrada” durante el último año. “Si no lo hubiéramos hecho, el desastre en la cadena de producción habría sido impresionante”, recalcó entonces.
Ahora, la nueva iniciativa de la empresa para combatir los efectos de la inflación en España supondrá un ahorro para los clientes de 200 millones de euros de aquí a final de año y tendrá un impacto en el margen de la compañía de -0,6 puntos. Se suman a la reducción realizada por la empresa de -1,1 puntos desde 2020 para minimizar el incremento de los precios de coste en origen y la industria.