Google acaba de traer su cable submarino Grace Hopper a España que se encargará de conectar Estados Unidos con Reino Unido y España. Concretamente, el cable de 16 pares de fibras ha llegado a las costas de Sopelana (Bilbao) y la compañía asegura que permitirá aumentar “la capacidad y la potencia” de sus servicios en Europa. Con la colaboración de Telefónica, ha amarrado el cable, que dobla la capacidad del de su competencia, al permitir la transmisión de más de 200.000 millones de tuits por segundo.
Google ha vinculado esta conexión con su compromiso con «la recuperación económica de España» después de la crisis del Covid-19. El cable se extiende hasta la costa sur del Reino Unido donde entrará por la costa de Bude.
El cable transoceánico de Google recorre más de 6.000 kilómetros por el fondo marino e incorpora una nueva tecnología de «conmutación de fibra» que mejora las prestaciones de estos canales de comunicación de datos que, junto a los satélites, constituyen los pilares de la transmisión de datos en las nuevas tecnologías. Los 340 Terabytes por segundo de capacidad facilitarían según las explicaciones dadas por Google a la transmisión de 4.000 vídeos por segundo entre 17,5 millones de usuarios. Otras equivalencias para entender la capacidad de este sistema de conexión es que facilitarían enviar en un segundo el equivalente en información al contenido de 340 millones de libros.
España está conectada con el resto del mundo a través de 27 cables submarinos y el de Google en la playa de Arrietara ha sido el último dentro de una estrategia para ser un «hub de datos, donde se produce la conectividad de múltiples regiones del mundo», según ha explicado el director general de Telecomunicaciones del Gobierno español, Arturo Azcorra.