Endesa ha registrado un beneficio neto ordinario de 1.459 millones de euros hasta el mes de septiembre, coincidiendo con el verano y el alza de los precios energéticos. La cifra representa un descenso del 14 % respecto al mismo periodo del año anterior. Comparando el resultado neto comunicado respecto al de 2020, la disminución se queda en el 3%.
Este descenso refleja, según la firma, “el impacto negativo que la excepcional subida de los precios de electricidad, motivado principalmente por el fuerte incremento del precio del gas y, en menor medida, del de los derechos de emisión del CO2”, está teniendo en su cuenta de resultados. A pesar del contexto complejo que vive el sector, Endesa ha registrado un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 3.125 millones de euros. Con ello, la compañía mantiene sus objetivos para el ejercicio, respaldados por partidas no recurrentes y los continuos esfuerzos de gestión.
El consejero delegado, José Bogas, ha recordado también que desde Endesa son «conscientes del impacto que está tensión en los precios está teniendo a en los clientes y asegura que la empresa está abierta al diálogo en todos los frentes».
