Ana Sánchez Arjona
El presidente enfriaba la opción de que se produzca una subida inmediata del SMI este mismo año. Lo hacía durante la rueda de prensa junto a la presidenta de la Comisión Europea, en la que afirmaba que España es el país europeo donde más ha subido en los últimos años y que lo relevante es crear empleo, a poder ser de calidad. Así que, jarro de agua fría para Yolanda Díaz, que venía preparando el terreno para lanzar su nueva ofensiva desde principios de junio. Y lo ha hecho esgrimiendo las conclusiones del comité de expertos al que Trabajo encargó un análisis sobre el calendario a seguir durante la legislatura para que el salario mínimo alcanzara, al menos, el 60% del sueldo medio de los españoles.
El Salario Mínimo Profesional es ya uno de los mayores motivos de enfrentamiento en el Gobierno de coalición. La vicepresidenta Yolanda Díaz ha vuelto a hacer bandera de la necesidad de subir el SMI antes de que acabe el año, pero tiene en frente a toda el área económica del Ejecutivo y, lo que es más importante, a su presidente.
Porque Pedro Sánchez ha enfriado una subida inmediata del SMI y apuesta por centrarse en recuperar el empleo perdido. Sánchez realizaba estas declaraciones junto a Ursula von der Leyen, la presidenta de la Comisión Europea, que ha visitado España para dar luz verde al Plan de Recuperación español. Con estas palabras el máximo responsable del Ejecutivo se alinea con la titular de Economía, Nadia Calviño, y en esta ocasión también con la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero que apuesta por esperar unos meses a que la recuperación pueda ir confirmándose con el avance de la campaña de vacunación. “El Ejecutivo cumplirá con su compromiso de subir el salario mínimohasta el 60% del salario medio en esta legislatura, pero esta senda de incrementos deberá ser compatible con la creación de empleo y no a costa de perder puestos de trabajo”.
El comité de expertos considera que el SMI debe subir desde los 950 euros actuales hasta situarse en una horquilla de entre 1.012 euros y 1.047 euros al mes para alcanzar el 60% del salario medio en España y cumplir así con lo que recomienda la Carta Social Europea
Una afirmación que suscribía el presidente que ha recordado que España es el país europeo donde más ha subido el SMI en los últimos años y que lo relevante es crear empleo, a poder ser de calidad. La prioridad “ahora mismo”, afirma, “es la creación de empleo y la consolidación del crecimiento económico”.
Se trata de un jarro de agua fría para la vicepresidenta tercera que parece ha rebajado la tensión que se había reactivado en las últimas semanas a imagen y semejanza de lo ocurrido el pasado mes de diciembre.
En ese momento, Díaz echó un pulso a la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y quedó finalmente desautorizada.
Pero ahora vuelve a intentarlo y desde principios del mes de junio está preparando el terreno. La advertencia del Banco de España de que la subida del 22% hasta 950 euros aprobada en 2019 tuvo un coste de hasta 180.000 empleos no le ha hecho reconsiderar lo que es un claro compromiso de su partido: llegar a 1.200 euros a final de legislatura.
Informe del BdE
Hay que recordar que, contra todo pronóstico, la vicepresidenta tercera agradeció al Banco de España la seriedad y la radiografía exhaustiva y precisa realizada sobre la evolución del salario mínimo. Lo aseguraba durante una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en la que sugirió que se debería “leer bien el estudio”, porque le daba la razón y reforzaba sus argumentos sobre la conveniencia de subirlo. En su opinión, en ningún momento hablaba de destrucción de empleo por el alza del 22,3% del SMI en 2019
Así que, Yolanda Díaz, tras hablar de recuperación consolidada del empleo a principios de mes, preparaba el espaldarazo definitivo que le proporcionaba el informe del grupo de expertos en asuntos laborales, miembros de distintos ministeriales, economistas, empresarios y sindicatos llamados a consulta por su departamento.
El principal objetivo del comité es determinar de cuánto se habla cuando la ministra se refiere al 60% del salario medio en España. La cantidad determinará el SMI de 2023, un compromiso electoral tanto del PSOE como de Unidas Podemos. El informe se ha filtrado a los medios antes de su presentación oficial y establece, según El País, el SMI para dentro de año y medio en una horquilla entre 1.010 y 1.047 euros mensuales en 14 pagas. Esto representan un considerable recorte sobre los 1.200 euros que asumió Díaz al ponerse al frente del Ministerio.
A falta de que el Gobierno asuma las conclusiones del informe y de que los agentes sociales hagan lo propio, se impondría así la “moderación” que ha demandado la responsable de Asuntos Económicos, Nadia Calviño. la vicepresidenta segunda ha insistido en que la subida del SMI debe ser compatible con el objetivo de no perjudicar la creación de empleo, en particular de los jóvenes, y confía en seguir aumentando esta renta mínima cuando lo permita la recuperación económica y del empleo “Hicimos bien en ser prudentes en diciembre”.
Lo que dice el Estatuto de los Trabajadores
El artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores recoge que “el Gobierno fijará anualmente, previa consulta con las organizaciones sindicales y asociaciones empresariales más representativas, el Salario Mínimo Interprofesional, tanto para los trabajadores fijos como para los eventuales o temporeros, así como para los empleados de hogar”. Esto supone que el Gobierno debe consultar a los agentes sociales si ven adecuado o no que se produzca una potencial subida.
El artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores recoge que “el Gobierno fijará anualmente, previa consulta con las organizaciones sindicales y asociaciones empresariales más representativas, el Salario Mínimo Interprofesional, tanto para los trabajadores fijos como para los eventuales o temporeros, así como para los empleados de hogar”
Concreta además que es de gran relevancia tener en cuenta “el Índice de Precios de Consumo, la productividad media nacional alcanzada, el incremento de la participación del trabajo en la renta nacional y la coyuntura económica general”, elementos que, al parecer, el comité de expertos del Ministerio no ha tenido presentes al establecer ese umbral de 1.012 a 1.047 euros, ya que su misión era que delimitarán a cuánto equivalía ese 60% del salario medio en España, y no centrarse en estudiar si es conveniente o no acometer esa subida en el periodo 2021-2023.
A este artículo del Estatuto de los Trabajadores se han referido los sindicatos CC OO y UGT que han reclamado al Gobierno que reabra de inmediato el debate sobre este incremento del SMI en la mesa de diálogo social y que no se demore todavía más la decisión.
Las organizaciones sindicales aseguran no tener dudas al respecto y creen que es el momento de abordar la cuestión. “Ahora que las previsiones económicas son favorables ya que el Banco de España prevé un crecimiento del 6,1% para 2021 y empieza a crecer el empleo, es el momento de revalorizar el SMI”, argumentan ambos sindicatos en un comunicado.
Tanto Comisiones Obreras como UGT valoran en su nota conjunta el análisis técnico realizado por el comité de expertos del Ministerio deTrabajo. Mientras los empresarios, en concreto Cepyme, apuestan por abordar también la subida en la mesa del diálogo social, aunque matizan que no es el momento de realizar un incremento por las perspectivas económicas y la situación del mercado de trabajo. La patronal CEOE, por su parte, prefiere esperar a conocer los detalles del informe definitivo.