Ana Sánchez Arjona ■
La parte socialista del Gobierno no se deja convencer por la solución que propone Podemos ante la escalada de precios que afecta a los alimentos. Dice Ione Belarra que, si no se toman medidas adicionales, la inflación podría estancarse en el 5% o 6% y opina que es prioritario topar o bonificar los precios de la cesta de la compra, “puesto que la medida de bajar el IVA ha sido un fracaso”. Una medida que tiene todavía “un largo recorrido”, señala Nadia Calviño, para recordar que todos los organismos prevén que a lo largo del año la inflación irá bajando paulatinamente. Insiste en que, para el Ejecutivo el freno al alza de los alimentos es “una prioridad” que marca la agencia social de los próximos meses.
“Ahora ni nos planteamos eso topar los precios de los alimentos”, señala la parte socialista del Gobierno. Un “no” a la insistencia de su socio representado en esta ocasión por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz y por la secretaria general de Podemos y ministra de Asuntos Sociales, Ione Belarra, sobre la conveniencia de intervenir la cesta de la compra o establecer un tope. Desde el departamento que gestiona Belarra han hecho llegar al PSOE “su alto nivel de preocupación por los datos del IPC, que muestran una vez más la escalada imparable del precio de los alimentos”.
Pero la parte socialista del Gobierno no se deja convencer de momento por la solución que propone Podemos. La ministra portavoz, Isabel Rodríguez, aseguraba en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que se trata de “datos adelantados de inflación” y que solamente refleja un “ligero incremento de apenas dos décimas, por lo tanto, se trata de inflación controlada y una cifra positiva si la comparamos con los países de nuestro entorno”. Eso, de hecho, en opinión de Moncloa, “es señal de que las medidas adoptadas por el Gobierno están siendo eficaces”.
Podemos está convencido de que los socialistas cambiarán de opinión y se aplicarán nuevas medidas para mejorar la situación de las familias que destinan una buena parte de su salario a la alimentación
Rodríguez ha recordado y explicado en cifras la acción del Ejecutivo en este asunto y ha cifrado la inversión realizado hasta el momento que se eleva a “45.000 millones de euros en distintas reformas y ayudas directas, para abordar desde el coste de la energía a la gratuidad del transporte público”, que no tiene precedentes. “El Gobierno está dando la respuesta que España necesita en un asunto que no es fácil, que es complejo y que, a pesar de todo, España sigue estando en los países más bajos en el indicador de inflación”.
Pero la realidad no es así a juicio del departamento del que es responsable Ione Belarra para el que, si no se toman medidas adicionales, la inflación podría estancarse en el entorno del 5% o 6%, sin que se aprecie una tendencia a la baja. Derechos Sociales opina que es prioritario topar o bonificar los precios de la cesta de la compra, “puesto que la medida de bajar el IVA ha sido un fracaso”.
Recuerda además que a principios de año se remitió al PSOE una propuesta para limitar los precios de una cesta básica y que posteriormente se hizo llegar a los socialistas una propuesta alternativa para bonificar un 14% productos como carnes, pescados, frutas y lácteos. Medidas similares a las que se tomaron en su día con el precio de las mascarillas o con los precios de los carburantes, en el caso de la bonificación
Se refieren además a la intervención en el mercado con medidas como el tope al gas o la limitación de la revalorización de los alquileres, que en un principio también se negaron a aplicar por parte del PSOE, y que han sido fundamentales para que España sea uno de los países con menor inflación de la UE.
Podemos está convencido de que los socialistas cambiarán de opinión y se mostraran receptivos en la aplicación de nuevas medidas para mejorar la situación de las familias, especialmente las de menores rentas, que son las que destinan una mayor parte de su salario a la alimentación.
Por su parte, Yolanda Díaz, señala que la inflación persiste por la subida del precio de la electricidad, pero sobre todo por la implacable subida de los alimentos. “Las subidas de tipos están generando dolor. Lo que hay que hacer ya es actuar sobre los márgenes empresariales. Las familias no tienen más tiempo que perder”.
Y es precisamente la manera de entender cómo se debe desplegar la agencia social donde chocan Unidas-Podemos y el PSOE. La parte socialista del Gobierno se ha volcado en medidas como las pensiones o la reciente convocatoria de becas mientras la parte de que representan Belarra y Díaz, por la intervención de los precios en cualquier sector que penalice a los ‘más débiles’.
La acción del Gobierno
En la última sesión de control en el Senado, Pedro Sánchez recordaba que el Gobierno había aprobado la mayor partida de becas de la historia de España: 2.500 millones de euros, unos 400 más que en la anterior convocatoria, lo que representa un incremento del 18% y un 60% por encima de la última que llevaba la firma de un Ejecutivo del PP. “Son fondos destinados a la igualdad de oportunidades, a que miles de estudiantes se puedan formar y que sus condiciones socioeconómicas no sean obstáculo para ellos. ¿Se imaginan cuántos jóvenes de nuestro país no podrían seguir estudiando si no contasen con estas becas que acabamos de aprobar?”.
El objetivo de ambos es rentabilizar políticamente la agenda social, algo que parece tener más complicado el PSOE, en medio de constantes choques con sus socios en el Ejecutivo. “Más allá de esta sala de prensa, del Congreso o de los debates en el Senado hay millones de españoles que conocen la acción del Gobierno porque va dirigida directamente a ellos”, explicaba Isabel Rodríguez en rueda de prensa tras, precisamente el Consejo de Ministros que aprobó la partida de becas.
Por su parte, Unidas Podemos conoce perfectamente el enorme desgaste que ha supuesto el choque del el ‘solo sí es sí’ y se ha puesto a trabajar en paralelo a su socio de Gobierno para situar en el centro de su estrategia de cara a las próximas elecciones, la agenda social.
Así que, va a reforzar su postura en varios de los frentes que tiene abiertos con la otra parte de la coalición, sobre todo dónde piensa que el PSOE que está mostrando más titubeante: el coste de los alquileres y el de los alimentos.
La inflación subyacente sube al 7,7%, récord desde que hay registros
El índice de precios al consumo es una asignatura pendiente para el Gobierno a pesar de que España tenga uno de los indicadores más bajos de Europa.
El indicador adelantado del IPC de febrero publicado por el INE registra un nuevo incremento de los precios: la inflación general sube por tercer mes consecutivo en comparación interanual, aumentando dos décimas respecto a enero y alcanzando el 6,1%.
Según el instituto de estadística, esta evolución es debida a que los precios de la electricidad repuntan este mes, frente al descenso registrado en febrero de 2022, y a que los alimentos y bebidas no alcohólicas se encarecen más que en febrero del año pasado. Esto da como resultado que incluso la tasa mensual se incremente un 1% respecto a enero, la mayor subida mensual desde junio de 2022, cuando la inflación general se situó en máximos históricos no vistos desde los años 80.
Además, la inflación subyacente, el índice que mide los precios sin alimentos no elaborados ni productos energéticos, continúa su escalada en febrero, sumando dos décimas más que en enero y registra ya un 7,7% de incremento respecto al mismo mes de 2022.
Aunque la inflación aumenta, el INE señala que los precios de los carburantes y lubricantes descienden en febrero en comparación con el aumento del mismo mes de 2022. También lo hacen los precios del transporte combinado de pasajeros por las medidas de rebaja del Gobierno, a falta de conocer los datos detallados a mediados del mes de marzo
El Gobierno explica que la subida de la inflación general es en una tendencia habitual de los primeros meses del año y, ante este nuevo repunte, pide paciencia para ir viendo cómo evoluciona la inflación durante los próximos meses. “Contemplamos una ligera alza, pero luego una bajada de los mismos a lo largo de los próximos meses como consecuencia de que ha habido en las últimas semanas una subida del precio de la energía”, señalaba el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez.
Por su parte, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, se mostraba convencida de que el último paquete de medidas adoptadas por el Ejecutivo en diciembre para paliar el alza de los precios, entre las que se encuentran las rebajas y la eliminación del IVA de determinados alimentos, “todavía tiene recorrido para tener impacto”.
“Todos los organismos prevén que a lo largo del año se irá conteniendo la inflación e irá bajando”, añadió la número dos del Ejecutivo para apuntar que el freno al alza de los alimentos es “una prioridad” para el Gobierno. De tal manera que el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, va a seguir manteniendo las reuniones con el Observatorio de la Cadena Alimentaria para analizar la evolución de la cesta de la compra.