Los precios subieron en mayo un 0,4% respecto a abril, y un 2,7% respecto al mismo periodo del año pasado. Es decir, cinco décimas más que en abril. Por lo tanto, transcurridos cinco meses del año, se ha disparado el indicador principal para medir la revalorización de las pensiones y de los salarios, según informó el Indicador Adelantado del Índice de Precios del Consumo, correspondiente a mayo, del Instituto Nacional de Estadística.
En estos momentos, la inflación anual, que es del 2,7%, es la tasa más elevada desde febrero de 2017 y triplica la subida del 0,9% que tuvieron el conjunto de las pensiones a principios de año. E incluso, la evolución de los precios es nueve décimas más que el incremento del 1,8% que tuvieron las rentas mínimas también a principio de año.
De seguir esta evolución de los precios, el Gobierno tendrá que abonar a los pensionistas, antes de abril del próximo año, una paga extraordinaria para compensarles por la desviación del poder adquisitivo perdido.