Ana Sánchez Arjona ■
La sanidad y las protestas que se están produciendo en prácticamente todas las comunidades se han convertido en una herramienta electoral determinante de cara a los próximos comicios. La masiva manifestación del domingo 12 de febrero en Madrid ha puesto al servicio de todos los partidos la narrativa de que su contrario no tiene un proyecto alternativo para la sanidad. Es más, Carolina Darias acaba de presentar un informe sobre las medidas tomadas por el Ejecutivo para contrarrestar los “años de desmantelamiento del Sistema Nacional de Salud” que lleva la firma del PP. Y en este escenario, el último barómetro del CIS situaba la sanidad como el tercer problema que más preocupa a los españoles en un 27% de menciones, nivel que no se veía desde hace mucho tiempo en las estadísticas, colocándola tras el desempleo y la crisis económica con el 33,1%.
Los problemas de la sanidad pública han resucitado como argumento para recuperar el pulso de la precampaña electoral de las autonómicas, de las municipales de mayo y también de las generales.
La masiva manifestación del domingo 12 de febrero en Madrid ha puesto al servicio de todos los partidos ahondar en la narrativa de que, su contrario no tiene un proyecto alternativo para la sanidad y que no se puede únicamente atribuir una mala gestión a los gobiernos autonómicos.Así que se puede deducir que la sanidad y las protestas que están sufriendo las comunidades se han convertido en una herramienta electoral determinante de cara a los próximos comicios.
En 2019, el 40% de quienes acudían a la primaria era atendido el mismo día o al día siguiente y el resto esperaba una media de 4,8 días. En 2021 el primer porcentaje bajó al 26% mientras que resto esperó 11 días de media
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, y durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, presentó un informe sobre las medidas tomadas por el Ejecutivo para contrarrestar los “años de desmantelamiento del Sistema Nacional de Salud” que lleva la firma del PP.
Posteriormente y un día después en la sesión de control al Gobierno, y en palabras de Pedro Sánchez que respondía a la portavoz del PP, Cuca Gamarra, el presidente defendió que mientras su Ejecutivo “refuerza” la sanidad, el Partido Popular la “recorta lo que implica que derivara a muchos pacientes a la privada” además de “insultar” a los profesionales sanitarios que se manifiestan en la capital.
Por su parte, Alberto Núñez Feijóo, ha responsabilizado al Gobierno de Pedro Sánchez de la situación de la Sanidad y ha considerado que quizá no se estén convocando nuevas plazas de médicos necesarias “para responsabilizar de ello a los ejecutivos autonómicos del Partido Popular”.
Y en este escenario, el último barómetro del CIS situaba la sanidad como el tercer problema que más preocupa a los españoles en un 27% de menciones, porcentaje que no se veía hace mucho tiempo en las estadísticas, colocándola tras el desempleo con el 31,5% y la crisis económica con el 33,1%.
Además, ese sondeo ponía el foco en la sanidad al concluir que debería situarse como el segundo capítulo del gasto público, por debajo de la investigación, que más debería crecer. Cerca de un 90% de los españoles piensa que se debería de “gastar más o mucho más que ahora”. El 94% de los votantes del PSOE y más del 98% de los de Unidas Podemos son de esta misma opinión que apoya también el 86% del electorado del PP y que está por encima 76% respecto a los que apoyan a Vox.
La postura de los ciudadanos es bastante clara en este sentido y va en paralelo a un amplio rechazo respecto a que los políticos quieran “colocar” sus medidas ideológicas dejando de lado las peticiones de los votantes. Según el mismo barómetro, un 63% de los encuestados piensan que los partidos tienen que asumir las medidas que plantean los votantes mientras por debajo del 25% están de acuerdo en que los partidos antepongan sus programas electorales.
Baja satisfacción
La baja satisfacción que demuestran los ciudadanos tiene una contundente razón de ser porque la atención primaria atiende 366 millones de consultas anuales y las urgencias en ese ámbito supera los 29 millones.
Por ejemplo, en 2019, el 40% de quienes acudían a la primaria era atendido el mismo día o al día siguiente y el resto esperaba una media de 4,8 días. En 2021 el primer porcentaje bajó al 26% mientras que resto esperó 11 días de media.
Y a pesar de que la atención primaria y hospitalaria obtienen una nota media según los datos que maneja el Ministerio de Sanidad, la satisfacción se ha reducido drásticamente tras la crisis sanitaria.
En estos momentos solo un 57% de los españoles consideran que la asistencia sanitaria funciona bien, cinco puntos menos que en el 2019, antes de la pandemia
El presidente del SATSE, Manuel Cascos, ha señalado que, al igual que las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, el conjunto de la población está muy preocupada por la situación de abandono y precariedad que sufre la Sanidad Pública, así como por el claro desinterés de gobiernos y partidos políticos por mejorar la atención sanitaria y los cuidados que se deben prestar a más de 47 millones de personas.
“A nuestros dirigentes públicos y políticos solo les preocupa, tras la pandemia, lo que genera titulares de prensa, y la Sanidad ya no les interesa a pesar de que nuestro sistema sanitario está sufriendo desde hace años una lenta agonía que provoca enormes listas de espera, déficit de profesionales o saturación y colapsos en los centros, entre otros graves problemas”.
Atención primaria, conflicto prácticamente en todas
las comunidades autónomas
Lo que está ocurriendo en Madrid en los últimos meses y que ha llevado a que sea esta comunidad el foco de atención de los medios de comunicación y aglutine buena parte de las críticas por su gestión sanitaria, tiene su explicación.
Se trata de la segunda autonomía que menos gasta en los servicios de salud por habitante.
En 2021, y según datos de la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública, FADSP, el Principado de Asturias destinó 1.949 euros per cápita, seguido de Castilla y León, con 1.817, y del País Vasco, con 1.809. En el otro extremo se situaron la Comunidad de Madrid, con 1.236 euros; Cataluña, con 1.279, y la Región de Murcia, con 1.305. Para 2022, los aumentos más significativos los han protagonizado Cataluña (13,8%), País Vasco (10%) y Región de Murcia (9,7%). Mientras tanto, Baleares lo bajará un 7,8%; Aragón, un 4,6%; Castilla-La Mancha, un 1,9%, y Asturias, un 0,8%.
En general, el porcentaje que se ha dedicado a la atención primaria este año en casi todas las comunidades se sitúa entre el 10% y el 17% del total del gasto sanitario, excepto en Cataluña, que donde representa un tercio.
El presidente de la FADSP, Marciano Sánchez Bayle, insiste en que la atención primaria “se traduce en un conflicto prácticamente en todas las comunidades autónomas”. No entiende que se haya perdido una gran oportunidad con la llegada de los fondos europeos.
La Federación ofrece datos de un estudio realizado en este sentido y en el que se revela que España es el tercer país de la Unión Europea empezando por abajo de la lista, que menos porcentaje de los fondos europeos destina a Sanidad.
En 2023 el presupuesto estatal previsto a sanidad es de 5.511 millones de euros, tal y como recogen los Presupuestos Generales del Estado.
La gestión de la sanidad pública después de la crisis sanitaria ha sido calificada como de ‘muy deficiente’ de nota media. Se trata de las conclusiones de un estudio realizado para el principal sindicato de enfermería de España, SATSE según el cual ocho de cada diez ciudadanos, 86,32%, considera que no se están cumpliendo los compromisos adquiridos por gobiernos y partidos políticos para mejorar la Sanidad Pública.
Con un 3,5 de media sobre 10, las personas encuestadas suspenden la actuación de la clase política en los últimos meses en temas sanitarios Los principales problemas para los usuarios son las listas de espera (70,54%), la falta de profesionales sanitarios (59,21%) y la saturación en los centros (53,77%).