La deuda del conjunto de las administraciones públicas registró en marzo un aumento del 1% respecto a febrero, hasta alcanzar el máximo histórico de 1,535 billones de euros, con lo que se sitúa en el 113% del PIB.
En el último año, la deuda pública ha crecido un 5,6%, con 81.540 millones de euros más, como consecuencia de los menores ingresos y los mayores gastos derivados, primero, de la crisis de la pandemia y, posteriormente, de las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania y el alza de precios.
Pese a esta subida de la deuda pública en términos absolutos, España logró moderar su peso sobre el PIB desde el 113,2% registrado a finales de 2022 al 113% en el primer trimestre de 2023, según el avance publicado por el Banco de España, que toma el PIB nominal de los últimos cuatro trimestres.
La subida mensual se debe al incremento del endeudamiento del Estado y de las CCAA, si bien también crece el endeudamiento de la Seguridad Social y los Ayuntamientos.