El Fondo Monetario Internacional ha recortado sus previsiones de avance económico del país para 2021, si bien parece asumir que la reactivación solo se retrasa porque eleva incluso en mayor medida el crecimiento esperado para 2022.
En concreto, con ocasión de la publicación de su informe de previsiones de otoño, titulado “Recuperación durante una pandemia: Problemas de salud, interrupciones en el suministro, y presiones de precios”, el FMI estima que la economía española crecerá solo un 5,7% en 2021 tras la inédita caída del 10,8%, que sufrió en 2020 como consecuencia de la pandemia del Covid-19.
El FMI saca definitivamente a España de la posición de liderazgo que en su día asumió que protagonizaría este año. Su avance del 5,7% sería superado por el incremento medio del 5,9% del PIB mundial
La cifra supone una rebaja de medio punto frente a las estimaciones de avance del PIB español publicadas por el FMI en verano, cuando ya había reducido en dos décimas la proyección inicial de primavera, que era del 6,4%.
La recuperación se retrasa
Los cálculos del FMI están realizados sobre los datos oficiales disponibles a 27 de septiembre, es decir, cuatro días después de que el INE rebajara su cálculo provisional de crecimiento en el segundo trimestre, lo que llevó a muchos economistas a anticipar que el incremento del PIB de este año acabaría siendo inferior al 6%. El FMI, en todo caso, parece asumir que la recuperación económica de la crisis del Covid tan solo se está retrasando pues incrementa la previsión de avance del PIB español para 2022 hasta el 6,4%. Aunque la cifra también queda lejos del 7% estimado por el Ejecutivo, supone una mejora de seis décimas desde la proyección hecha en verano por el organismo internacional y de 1,7 punto superior a la de primavera.
Como resultado, el FMI descabalga definitivamente a España de la posición de liderazgo que en su día asumió que protagonizaría este año. Su avance del 5,7% sería superado por el incremento medio del 5,9% del PIB mundial, el 6% de EE UU, el 6,3% de Francia, el 5,8% de Italia, o el 6,8% de Reino Unido, por citar solo las principales economías. Supera eso sí el 5% de media de la zona euro o el 3,1% de Alemania. Del lado de los emergentes, con un incremento medio del 6,4%, el avance español también queda ensombrecido frente al 9,5% de India, o el 8% de China.
Sin embargo, la nueva estimación de crecimiento económico que el FMI dibuja para 2022 sí que sitúa a España en cabeza de los avances que experimentarían las principales potencias mundiales. Su alza del 6,4% supera el 4,9% de media mundial, el 4,5% de las economías avanzadas, el 5,2% de EE UU o el 4,3% de la zona euro. Queda por encima también del 4,6% alemán, el 3,9% francés o el 4,2% italiano. Solo India, ya entre las economías emergentes, promete superar su avance con una subida del 8,5%, muy por encima del 5,6% chino.
Las proyecciones del FMI sobre España incluyen el impacto de las ayudas europeas así como la batería de medidas de apoyo aprobadas por el Gobierno para combatir los efectos de la pandemia, incluyendo las novedades tributarias aprobadas este año así como las subidas de pensiones impulsadas. Las estimaciones a partir de 2022, eso sí, son a políticas constantes a la espera de conocer los cambios que impulsará el Gobierno.
Bajo estos supuestos, el Fondo Monetario calcula que la tasa de desempleo española apenas caerá del 15,5% al 15,4% este año, para reducirse ya al 14,8% en 2022. En paralelo, los precios de consumo, que en 2020 cedieron un 0,3%, saltarían un 2,2% este año que se moderaría al 1,6% el próximo ejercicio.