El presidente del Instituto Nacional de Estadística (INE), Juan Manuel Rodríguez Poo, ha presentado su dimisión del cargo que ostentaba desde el año 2018 al frente del organismo.
En las últimas semanas, la institución denunció una campaña para criticar sus estimaciones del IPC, después de haber recibido críticas del Gobierno por la forma en que calculaba el PIB.
El Ejecutivo ha confirmado, mediante un comunicado, que Rodríguez Poo deja su puesto como máximo responsable del INE por “motivos personales” y ahora abre un proceso de sustitución para este cargo que la Vicepresidencia Económica “espera cerrar en las próximas semanas”.
La dimisión de Juan Rodríguez Poo como presidente del Instituto Nacional de Estadística, anunciada por el Gobierno y justificada por “motivos personales”, ha provocado un terremoto dentro del organismo público
En este sentido, el Gobierno ha adelantado que, en las próximas semanas, con la aprobación por el Consejo de Ministros de un nuevo Estatuto para el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el relevo en la presidencia del organismo, se continuarán con las reformas “para reforzar y modernizar el Sistema Estadístico estatal”, que ya han alcanzado «un hito fundamental con la aprobación en el Parlamento de una modificación de la Ley de la Función Estadística Pública».
El departamento que lidera la vicepresidenta primera Nadia Calviño ha destacado que Rodríguez Poo “ha sido el principal impulsor de este proceso de transformación desde su nombramiento en octubre de 2018″ y ha reiterado que las reformas facilitarán la utilización de nuevas fuentes de información basadas en registros administrativos y Big Data, mejorando la calidad de las estadísticas y reduciendo la carga de respuesta para las empresas y ciudadanos informantes”.
Código de Buenas Prácticas
Las mismas reformas, según el Gobierno, estarán «plenamente alineadas con el Código de Buenas Prácticas de las estadísticas europeas» y las iniciativas de adaptación de los sistemas estadísticos europeos «a la mayor disponibilidad de datos que permite la economía digital y a las nuevas exigencias de calidad de los ciudadanos».
La dimisión de Juan Rodríguez Poo como presidente del Instituto Nacional de Estadística (INE), anunciada por el Gobierno y justificada por “motivos personales”, ha provocado un terremoto dentro del organismo público.
La Asociación de Estadísticos Superiores del Estado (AESE) ha hecho público un duro comunicado en el que critica que hasta ahora “ningún Presidente del INE fue cesado sin mediar un cambio de Gobierno” y que se cuestionan las cifras “tan relevantes” como el IPC o el PIB. “Esto podría ser interpretado por la sociedad como un ataque a la independencia del Instituto”.