Luis Carlos Ramírez
El “ajuste mínimo” de Gobierno con la incorporación de Iceta al Ministerio de Política Territorial y la de Darias en Sanidad –para suplir la marcha de Illa– podría repercutir en la gobernabilidad de Cataluña y del gobierno de la nación. La “operación de Estado” para “derrocar al independentismo” –según ERC– se traduce en clara hostilidad contra el Ejecutivo de Madrid al que los republicanos ponen en jaque con su voto en contra –junto a Cs y PP– del decreto que regula los Fondos de Recuperación, salvado ‘in extremis’ por Vox. Los nuevos ministros deberán aportar algo más que la “guerra sin cuartel” para vencer al virus o la defensa de la “nación de naciones” para tranquilizar España.
El hartazgo ciudadano por la deriva de los contagios y su estrategia para atajarlos colma la paciencia de los gobernados que denuncian el colapso hospitalario, el desatino de la vacunación, el estraperlo de las farmacéuticas y hasta el privilegio de altos cargos para obtener la inmunidad. La mayoría del Parlamento, por su parte, reprocha unánime la despedida –en el último minuto– del ya exministro de Sanidad para implicarse –ahora sí– a tiempo completo, como candidato a la Generalitat con el beneplácito, pompa y circunstancia de Pedro Sánchez.
Cataluña y España
La marcha de Illa la solventa el presidente con un “ajuste mínimo” de Gobierno y su sustitución por Carolina Darias junto a la incorporación del líder del PSC, Miquel Iceta, al Ministerio de Política Territorial, que además de ser la primera remodelación ministerial podría repercutir en la gobernabilidad de Cataluña y del gobierno de la nación. El denominado ‘factor Illa’ para ganar las elecciones catalanas y su hipotética formación de gobierno corre el riesgo de convertirse en “suflé” –al decir de alguno de sus socios (En Comú Podem)– si su eventual triunfo no consigue los apoyos necesarios para presidir la Generalitat.
De momento, la “operación de Estado” –como la califica ERC– para “derrocar al independentismo” se traduce en clara hostilidad contra el Ejecutivo de Madrid al que los republicanos ponen en jaque en el primer pleno del año. Su voto en contra –junto a Cs y PP– del decreto que regula el reparto de los Fondos de Recuperación –calificado por Rufián como el “botín” de las empresas del Ibex– es salvado in extremis por la abstención patriótica de Vox. Ambas formaciones consiguen la comparecencia también del ‘explosivo’ comisario Villarejo –en prisión– en la comisión del caso Kitchen en contra el criterio del PSOE.
Precampaña con Sánchez y Junqueras
Sánchez comienza la campaña electoral de apoyo a Illa con hasta seis mítines para contrarrestar el periplo de rivales como Junqueras, que también hace campaña fuera de la cárcel tras haber cumplido la cuarta parte de su condena de 13 años de prisión. Ello le da derecho a salidas ordinarias de hasta tres días para combatir el “155 encubierto» como considera la decisión del TSJC de suspender el aplazamiento electoral. Pablo Casado, junto a la exministra Ana Pastor se movilizan igualmente para evitar el posible sorpasso de Cs y la entrada por primera vez de Vox en el Parlament como pronostican las encuestas.
El Gobierno que salga de las urnas repercutirá en la marcha de la legislatura de la que se cumple el primer año del gobierno de coalición. El objetivo del candidato del PSC –favorito en las encuestas del CIS– es gobernar Cataluña en coalición con los comunes (En Comú Podem) y el apoyo externo de ERC, una operación más que arriesgada que los republicanos rechazan. Lo que sí descarta Illa es encabezar un Govern de concentración constitucionalista, junto a Ciudadanos, PP o Vox, entre otras cosas, porque no darían los escaños para la necesaria mayoría de 68 escaños y, además, agitaría el frentismo en el Parlament.
Guerra y caos de vacunación
La “guerra sin cuartel” para vencer al virus que promete la nueva ministra de Sanidad (Darias) deberá contar con algo más que una planificación más que deficiente del Gobierno y la coordinación manifiestamente mejorable de las comunidades para inmunizar a la población. La nebulosa de medidas, horarios y hasta estrategias para contener la pandemia ha desembocado en la saturación de los hospitales y el retraso de la vacunación por escasez de dosis que la Comisión Europea reclama a la industria farmacéutica acusándola incluso de fraude. Ello se suma al revuelo e indignación por el quebranto del protocolo de inmunización protagonizado por representantes políticos, militares, judiciales, sindicales e incluso eclesiásticos cuyas disculpas o dimisiones como la del máximo responsable del Ejercito (Jemad) o del obispo de Mallorca los sitúan en el ojo del huracán.
Poder judicial
El primer pleno extraordinario de 2021 rechazaba las enmiendas de totalidad (PP, Vox y Cs) al proyecto de Ley que impedirá al Consejo del Poder Judicial hacer nombramientos discrecionales mientras esté en funciones, como pretenden PSOE y Unidas Podemos. La enmienda ‘popular’ proponía otorgar más autonomía a los jueces, con la elección de una parte de los vocales del CGPJ por los propios magistrados. Desde la Comisión Europea, su vicepresidenta, Vera Jourová, vuelve a recordar que la futura reforma debe garantizar recomendaciones como la del Consejo de Europa para elegir “al menos la mitad de los miembros de dichos consejos judiciales entre sus pares.
Patinazo de Marlaska
Las disculpas públicas del ministro del Interior por la utilización de su cuenta oficial de Twitter en apoyo de Salvador Illa no satisfacen a la oposición. Un mensaje de Marlaska –borrado después– ensalzaba la cualidad dialogante del candidato socialista para “liderar el cambio que necesita Cataluña”, considerado una “grave” instrumentalización de las redes institucionales con beneficio partidista.
Lapidario
“Te va a encantar el trabajo. Vas a disfrutar”
Salvador Illa (a su sucesora en el ministerio de Sanidad)
Nombres propios

Iceta, con los indultos y la Constitución
El nuevo ministro de Política Territorial se estrena reivindicando una España «plural, unida y orgullosa de su diversidad” asegurando que en su departamento no habrá “sobresaltos, inventos, ni improvisaciones”. Su compromiso “con la Constitución”, aplicando la “cooperación y cogobernanza”, servirá para modernizar la Administración y contribuir a la gestión de la pandemia. La oposición le recuerda a Miquel Iceta su defensa del indulto a los encarcelados del procés y su apuesta por la «nación de naciones», en la que existen al menos “ocho, según los estatutos, y nueve si se suma el Preámbulo de Navarra”.

La caída de Susana Díaz
La renovación del socialismo catalán tras el intercambio de papeles entre Illa e Iceta acelera el relevo de líderes en otros territorios como Andalucía, donde la expresidenta, Susana Díaz, sigue echando un pulso a Ferraz antes de dejar “expedita” la Secretaría General del PSOE-A. Militantes malagueños y de otras provincias impulsan el manifiesto Rearmar el socialismo andaluz, una necesidad ineludible, para reclamar la salida de Díaz con una “alternativa solvente y creíble” de la primera federación socialista del país. El diputado Felipe Sicilia y el alcalde de Sevilla, Juan Espadas y la ministra María Jesús Montero figuran como alternativa.