Que las criptomonedas, justamente sospechosas de instrumento para evadir impuestos (para eso se han creado), avanzan inasequibles al desaliento e impertérritas ante las zancadillas de banqueros y la persecución de las agencias tributarias y de las autoridades que se ocupan del blanqueo de capitales, da fe entre otros fenómenos la creación de La Asociación de Periodistas e Investigadores de Criptomonedas (ACJR), que afirma nacer con el sano propósito de elevar los estándares del trabajo reporteril, de incentivar la educación sobre la tecnología y reconocer la labor de los comunicadores. Ya se han despejado las dudas sobre el futuro de las monedas digitales y se multiplican las presiones de banqueros y gobiernos para que sean reguladas a nivel mundial.