Uno de los efectos de la crisis sanitaria ha sido la suspensión de las convocatorias de oposiciones en todos los niveles de la Administración. Entre las afectadas están las 300 plazas de jueces y de fiscales que el Ministerio de Justicia iba a cubrir en 2020 y que están en compás de espera. La situación es preocupante ya que prácticamente la totalidad de los Juzgados están al límite por falta de personal antes de la crisis y el retraso empeorará la situación teniendo en cuenta, además, que estamos inmersos en la tercera ola de la pandemia.