En España se tiran alrededor de 1.364 toneladas de comida al año. El Consejo de Ministros acaba de aprobar el anteproyecto de ley para combatir el desperdicio alimentario que obligará a vender productos «feos» en condiciones óptimas de consumo. Esta normativa no solo obligará a los establecimientos a vender los productos “feos”, sino a donar excedentes a través de convenios con ONG, bancos de alimentos, y otras organizaciones.
La nueva propuesta también pretende incentivar la venta de alimentos de proximidad, ecológicos y a granel. Recoge así buena parte de las reivindicaciones de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en materia de desperdicio alimentario. Los establecimientos deberán ofrecer a sus clientes la posibilidad de que se lleven, sin coste adicional, lo que no han consumido, además deberán informar de ello de forma visible, preferentemente en la carta o menú.
De la misma manera, las administraciones públicas deberán realizar campañas de sensibilización y de promoción para fomentar el consumo responsable de alimentos y promover la prevención y reducción de las pérdidas y el desperdicio alimentario. Lo cierto es que desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) se felicitan de que por fin el Ejecutivo, con el que habían mantenido algunas reuniones al respecto, recoja buena parte de sus peticiones, que ya aparecían en su campaña “No tires la comida” que tenía como objetivo promover una ley en España contra el desperdicio de alimentos debido a las implicaciones que esto tienen no sólo a nivel económico sino también humanitario y medioambiental.