“Esta tecnología puede causar un daño significativo al mundo. Si algo va mal, puede acabar muy, muy mal”. Es la advertencia que ha lanzado Sam Altman, el CEO de OpenAI, empresa a la que pertenece ChatGPT, y que acaba de comparecer ante el Senado de los Estados Unidos con este rotundo mensaje sobre la Inteligencia Artificial. Y es que la IA ya está aquí, entre nosotros. Solo hace falta echar un vistazo al informe ‘La plataformización del trabajo’ publicado por el Joint Research Centre de la Comisión Europea, que dedica un capítulo a la implantación de programas de inteligencia artificial que toma decisiones en relación con los trabajadores. El estudio revela que, por ejemplo, el 20% de los trabajadores alemanes y el 35% de los españoles están sujetos al menos a una forma de gestión algorítmica de su actividad y que, en el caso de nuestro país, el 20% tiene asignados automáticamente sus turnos o su jornada mediante un dispositivo digital.