No es frecuente, ni casual, que un miembro de la valenciana familia Roig, propietaria de Mercadona, haga declaraciones, no ocasionales a la prensa. Atención pues, a las de Juana Roig, la hija pequeña de Juan Roig y de Hortensia Herrera, que con 39 años ya no es una niña, llevan mensaje.
La gran pregunta que se hacen los empleados de la primera cadena de tiendas de España, que superan los 93.000, y sus numerosos proveedores, es qué pasará cuando se cumplan las imprevisiones sucesorias de su fundador, el Gran Jefe que ha cumplido los 73 años con plena lucidez.
Muy finamente, Juana se ha insinuado con trabajada humildad en un ‘podcast ‘en el canal Itnig de YouTube donde asegura que cuando se jubile su padre, algo lejano, lo suyo es que le suceda un técnico más que alguien de la familia, pero… “Mercadona –dixit– es un desafío muy grande. Tiene más sentido que sea un ejecutivo a alguien de la familia, la persona que para entonces esté mejor preparada. Yo tengo que ver todavía si me gustaría ser presidenta”.
Y acto seguido tira de currículo: «Yo estudié en el ESADE en Barcelona.Después pasé por Mango y por Inditex. Luego estuve cuatro años en Mercadona como agente de compras. Estuve en Londres y cuando volví gestioné una joyería un tiempo. Por último, me metí en Mercadona Online. No he hecho nada ‘tech’, he empezado aquí».
Pues aquí está Juana, una Roig joven pero suficientemente preparada.