Ahora que todos nos habíamos acostumbrado a las videollamadas como herramienta habitual de contactos laborales y familiares, pandemia mediante, el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, siempre a la última ha inaugurado otra etapa. Y así, ha irrumpido en el Digital Summit, un encuentro anual que la compañía organiza entre empleados del grupo y los más sabios del mundo tecnológico y que este año lógicamente era telemático, como un holograma en 3D de cuerpo entero para sorpresa de los presentes. Quienes colaboran con él aseguran que este despliegue de tecnología es un empeño personal del propio Galán, un convencido del poder que ésta puede tener en la recuperación económica.