En las grandes empresas, el impacto derivado de la crisis asociada a la pandemia ha recaído sobre los hombros de los trabajadores en forma de despidos y ajustes salariales, con una bajada del 25% en los contratos temporales, mientras un 40% de las empresas aumentó el importe que destinó a dividendos. Es una de las conclusiones del informe anual de Oxfam Intermón, Negocios como siempre, sobre las empresas del Ibex 35 que reconoce que una mayoría de empresas del Ibex 35 lo pasaron mal durante 2020. A la hora de hacer ajustes salariales, las empresas del Ibex 35 sí han repartido el esfuerzo de forma más equitativa entre los diferentes niveles jerárquicos, pero a la hora de repartir dividendos es cuando muchas de las empresas del Ibex 35 no escatiman, aun en un escenario de incertidumbre como el que había al final de 2020. Aunque una de cada tres empresas optó por no retribuir a sus accionistas, otras seis empresas (Acerinox, ACS, Endesa, Inditex, Merlin Properties y Telefónica) repartieron un dividendo superior a los beneficios obtenidos en el ejercicio y cuatro (Cellnex, Ferrovial, Naturgy y Repsol) siguieron retribuyendo a sus accionistas a pesar de reportar pérdidas.