El Gobierno de Castilla y León está haciendo cuentas, todavía, sobre cómo ha sido la acogida entre sus ciudadanos de la supresión del impuesto de Sucesiones y Donaciones un mes después de que quedará bonificado al 99%. Lo que se ha filtrado de momento es que las estimaciones del Ejecutivo que preside Alfonso Fernández Mañueco apuntan a que se han multiplicado por tres este tipo de transmisiones con un ahorro para los contribuyentes que podría supera los 7 millones de euros. De momento, lo que Mañueco ha hecho es cerrar filas con la Comunidad de Madrid respecto a una posible reimplantación de este impuesto por parte del Ejecutivo central. “El Gobierno habla de armonización fiscal y lo que en realidad esconde es un hachazo al bolsillo de los españoles. Utilizaremos todos los medios a nuestro alcance para que no lo haga”, amenaza al más puro estilo Díaz Ayuso.