Desde hace algunos años, los neobancos se han introducido en el panorama financiero español. Se trata de compañías que operan en el sector bancario de manera completamente digital, consiguiendo así importantes reducciones de costes y cargos por servicio. En Europa, los neobancos han tenido una muy buena acogida, por su parte, en España, aunque la más veterana llegó en 2015, fue en 2019 cuando comenzó su expansión en nuestro país.
Algunos análisis, como el que ha realizado Smartme Analytics, la compañía de data observacional, con datos obtenidos gracias a su tecnología que comparan los principales players (Revolut, N26, Rebellion Pay y Bnext) con la banca tradicional digital, arroja un dato que debería poner nerviosos a los bancos tradicionales: la neobanca ya ocupa el 29% de la cuota del mercado de la banca digital en España. El 10% de esta cuota corresponde a Revolut, siendo así la que más cuota acapara. Sin embargo, destaca la española Rebellion Pay por ser la que más crece, con un incremento de cuota del 172% desde 2019.