Los precios mundiales de los alimentos siguieron subiendo por quinto mes consecutivo en octubre, impulsados por los cereales, el azúcar, los productos lácteos y los aceites vegetales, según un nuevo informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El índice de precios del azúcar de la FAO se incrementó un 7,6 % respecto al mes anterior
El índice de precios de los alimentos de la FAO, que realiza un seguimiento de los precios internacionales de los productos alimenticios más comercializados, registró un promedio de 100,9 puntos en octubre de 2020, esto es, un 3,1 % más que en septiembre y un 6,0 % por encima de su valor de octubre de 2019.
El índice de precios de los cereales de la FAO subió un 7,2 % respecto del mes anterior y se situó un 16,5 % por encima de su valor de octubre de 2019. El aumento se vio principalmente impulsado por los precios del trigo en un contexto caracterizado por la reducción de las disponibilidades de exportación, las difíciles condiciones de cultivo en la Argentina y la continuación del tiempo seco que está afectando a la siembra de trigo de invierno en Europa, América septentrional y la región del Mar Negro. Los precios del maíz, la cebada forrajera y el sorgo también siguieron experimentando una presión al alza en octubre, mientras que los del arroz disminuyeron.
El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO aumentó un 1,8 % durante el mes, registrando un máximo por noveno mes consecutivo, debido a los precios más firmes de los aceites de palma y soja. Por el contrario, los precios del aceite de colza disminuyeron moderadamente a causa de la mayor incertidumbre sobre la demanda en la Unión Europea (UE), tras el reciente deterioro de la situación de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) en toda la región.
El índice de precios de los productos lácteos de la FAO subió un 2,2 % respecto de septiembre, principalmente por el queso, seguido de la leche desnatada en polvo, la leche entera en polvo y la mantequilla. El aumento de los precios en octubre reflejó una contracción del mercado en relación con las entregas a corto plazo, sustentada en la pujante demanda de importaciones de los mercados de Asia y Oriente Medio.