Más de la mitad de los asesores financieros españoles (55%) apunta a la generación millennial (entre 24 y 39 años) como la más interesada en las inversiones con criterios ESG, frente a un 30% que se decanta por la generación X (entre 40 y 55 años), una percepción muy similar a la que tienen los asesores a nivel europeo. Esta es una de las principales conclusiones de un estudio elaborado por FECIF (Federación Europea de Asesores e Intermediarios Financieros) con la colaboración de EFPA España, que ha contado con la participación de más de 2.000 asesores financieros de España, Francia, Italia, Reino Unido, Alemania, Holanda, Luxemburgo, Suiza, Austria, Croacia y República Checa, donde analiza las visión de los asesores con respecto a los criterios de inversión ESG, con qué frecuencia consideran estos asuntos con los clientes, y su punto de vista sobre las empresas de inversión y los reguladores en lo que respecta al ámbito de la sostenibilidad.
El 58% de los asesores en España tiene en cuenta siempre –o en una mayoría de ocasiones– las inversiones ESG cuando asesora a clientes, frente a un escaso 5% que nunca atiende a estos parámetros
El 58% de los asesores en España tiene en cuenta siempre -o en una mayoría de ocasiones- las inversiones ESG cuando asesora a clientes, frente a un escaso 5% que nunca atiende a estos parámetros. Para casi la mitad de los profesionales (44%), el motivo principal es que se trata de una tendencia de inversión que interesa a los clientes, siete puntos más que a nivel europeo, mientras que para cuatro de cada diez invertir en ESG es importante desde el punto de vista ambiental (frente al 45% en toda Europa) y solo un 15% alude en España a la obtención de mejores rendimientos en las inversiones, como motivo principal para apostar por las inversiones sujetas a estos criterios. Además, casi ocho de cada diez asesores financieros (78%) suele consultar de forma recurrente índices de sostenibilidad, dos puntos por encima que la media comunitaria.
Sobre los motivos que impulsan a las sociedades de gestión de activos a ofrecer productos ESG a sus clientes, los profesionales españoles se reparten entre los que creen que las entidades desean genuinamente influir en la sostenibilidad futura del mundo (37%) y los que consideran que lo hacen principalmente para labrarse una reputación positiva (36%).