La creación de criptoactivos propios está cobrando fuerza entre empresas de América Latina, especialmente en Brasil.El último a embarcarse en esta tendencia ha sido Nubank, que lanzará su propia moneda digital, Nucoin, en el primer semestre de 2023.
El objetivo de Nubank, una fintech con 70 millones de clientes en Brasil, México y Colombia, y que cuenta con inversiones de Warren Buffett, es ofrecer a los clientes brasileños beneficios como descuentos y ventajas a medida que acumulan Nucoins. La empresa invitará a unos 2.000 clientes a participar en la prueba de Nucoin a lo largo de octubre y noviembre.
La resiliencia de los mercados emergentes en relación a las naciones desarrolladas ha empezado a llamar la atención de los gestores de dinero
«Es un camino sin retorno y a partir de ahora veremos otras empresas, tanto del segmento financiero en el de pagos y marketplaces analizando esta posibilidad [de tener su propio criptoactivo]», dijo Henrique Teixeira, jefe Global de Desarrollo de Negocios de la argentina Ripio, proveedora de la infraestructura de tokens de Mercado Livre, en una entrevista con Bloomberg Línea.
La resiliencia de los mercados emergentes en relación a las naciones desarrolladas ha empezado a llamar la atención de los gestores de dinero. Citigroup lo llama «una incógnita». Goldman Sachs lo describe como «sorprendente resiliencia». Y para Columbia Threadneedle es «una recompensa por la proactividad».
La incesante fortaleza del dólar, que lo ha llevado a distintos récords, ha redundado en la caída de las monedas del mundo. Sin embargo, un análisis más detallado revela que el índice de referencia para el tipo de cambio de los mercados emergentes tiene la mitad de las pérdidas de los desarrollados. Y la tendencia continúa aún con la caída de los precios de las materias primas, clave para las economías de estos países.
Este éxito de los países en desarrollo a la hora de capear parte de la volatilidad ligada al endurecimiento monetario de la Reserva Federal pone en duda la suposición de que serán el epicentro de cualquier colapso del mercado impulsado por el aumento de los rendimientos estadounidenses.
En realidad, gran parte del dolor se está sintiendo en el Reino Unido y Europa, mientras que países como Brasil y México están viendo cómo sus divisas atraen a los inversores con jugosos rendimientos, resultado de algunas de las subidas de tasas más agresivas del mundo, según Bloomberg.