El rally de Repsol parece no tener fin. Se prolonga desde diciembre y ha provocado que el valor acumule una revalorización en lo que va de año del 37%, hasta alcanzar una capitalización bursátil superior a los 21.800 millones de euros.
La tendencia se ve impulsada por la recomendación que la semana pasada lanzaban los analistas de JP Morgan han decidido elevar el precio objetivo de Repsol hasta los 17,50 euros, desde los 16,50 euros anteriores. Esa cifra concede a la petrolera española pilotada por Josu jon Imaz un potencial de revalorización adicional por encima del 25% respecto a los niveles que viene registrando después de los días festivos de Semana Santa.
La cotización de Repsol se ha visto propulsada en los últimos meses por la subida sostenida del precio del petróleo, lanzada más aún desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia. En ese momento, cuando las tropas de Moscú cruzaron la frontera, el barril de Brent llegó a rozar los 140 dólares. A día de hoy ese precio se ha moderado y ha descendido hasta un nivel ligeramente superior a los 100 dólares. Y la posibilidad del embargo al petróleo ruso no hace sino sostener las posibilidades alcistas del sector.