Mercedes Cobo ■
El potencial crecimiento de India se sitúa en el 6% en 2023, impulsado por la demanda interna. Junto con China, probablemente representará la mitad del crecimiento mundial este año. La renta variable del país asiático ha tenido un año 2022 volátil pero resistente, en el que ha superado a la mayoría de los mercados globales. Los expertos señalan que los fundamentales y las perspectivas a medio y largo plazo siguen siendo estables, y puede continuar una trayectoria alcista.
El presupuesto de India para el ejercicio fiscal 2023-2024, anunciado recientemente y que comienza en abril, apunta a una consolidación fiscal gradual y sigue centrándose en el aumento de las inversiones de capital.
A corto plazo, según Mali Chivakul, economista de mercados emergentes en J. Safra Sarasin Sustainable AM, esto implica que su déficit por cuenta corriente probablemente seguirá siendo elevado. “Por lo tanto, somos prudentes con respecto a la rupia india, también teniendo en cuenta las recientes preocupaciones sobre el grupo empresarial Adani (Gautam Adani era el multimillonario indio más rico de Asia y el cuarto hombre más rico del mundo, pero ha perdido la mayor parte de su fortuna tras ser acusado de lavado de activos y manipulación con su conglomerado empresarial) y su impacto en la confianza de los inversores extranjeros”, indica.
En J. Safra Sarasin Sustainable AM son prudentes con respecto a la rupia india teniendo en cuenta las recientes preocupaciones sobre el grupo empresarial Adani
Destaca que, con su creciente población y unas infraestructuras inadecuadas, las necesidades de financiación de la India para sus gastos de capital a medio plazo son grandes. En su opinión, el país necesitará más entradas de capital extranjero, dada su elevada deuda pública y la necesidad de proseguir la consolidación fiscal.
“India es uno de los puntos positivos en cuanto a crecimiento este año. Su economía, impulsada sobre todo por la demanda interna, sigue recuperándose de los efectos de la pandemia. Tanto los PMI manufactureros como los de servicios muestran resistencia y la producción industrial incluso subió en diciembre. Aunque el crecimiento se ralentizará, ya que las condiciones financieras son ahora más estrictas que el año pasado, es probable que se sitúe en torno a su potencial de crecimiento, del 6%. La inflación general bajó al 5,7% en diciembre, al disminuir los precios de los alimentos, lo que sugiere que el Banco de la Reserva de la India (RBI por sus siglas en inglés) podría hacer una pausa en su próxima reunión de esta semana. Y, si bien las exportaciones de bienes se ven influidas por la ralentización mundial del sector manufacturero, las exportaciones de servicios (principalmente informáticos) siguen prosperando”, explica.
Divisas
Destaca que, aunque un dólar estadounidense más débil debería apoyar a las divisas de los mercados emergentes, son más cautos respecto a la rupia india (INR). “El considerable déficit por cuenta corriente es uno de los factores. Otro factor importante es la compra de divisas por parte del Banco de la Reserva de la India (RBI) para reponer sus reservas. Un último factor es el alto nivel de tenencia de acciones indias por parte de inversores extranjeros, que aumentó significativamente desde que comenzó la pandemia. El sentimiento de los inversores extranjeros podría verse lastrado por las recientes preocupaciones del grupo Adani, y podría perjudicar a la INR a corto plazo. No obstante, la inclusión de India en el índice de bonos (aplazada desde el año pasado sin fecha definitiva) dará un impulso a las entradas de capital y apoyará a la INR”.
Para Mali Chivakul, a medio plazo, el gasto de capital seguirá siendo el centro de atención de India. “Este año, India va a tomar el relevo de China como país más poblado del mundo. Según las proyecciones de fecundidad constante de la ONU, la población india alcanzará los 1.600 millones de habitantes en 2040. Al mismo tiempo, la tasa de urbanización de India sigue siendo baja, del 35% en 2021. La tasa de urbanización actual de China es casi el doble. El proceso de urbanización de China en los últimos 20 años ha sido una de las principales fuentes de crecimiento. A medida que la población pasa de la agricultura de subsistencia en las zonas rurales a los sectores manufacturero y de servicios en las ciudades, la productividad aumenta. El desarrollo urbano permite mejorar tanto la productividad como la calidad de vida. El Banco Mundial indica que, en 2036, 600 millones de personas vivirán en ciudades urbanas en India, lo que representa el 40% de la población. Asimismo, sugiere que India necesitará unos 55.000 millones de dólares al año durante los próximos 15 años para financiar el desarrollo de sus infraestructuras”, indica.
En cuanto a de dónde procederá la financiación, señala que el Gobierno indio ha hecho hincapié en el gasto capital, tanto a nivel central como estatal, destaca que la deuda pública es ya elevada y podría desplazar la inversión privada, por tanto, indica, India necesita mucha más inversión extranjera para financiar sus necesidades de inversiones de capital.
Renta variable
Jigar Gandhi, India investment specialist de Schroders, destaca que la India ha superado al Reino Unido y se ha convertido en la quinta economía mundial y, según algunos informes, se convertirá en la tercera en los próximos diez años si la política económica y el crecimiento siguen por el buen camino. “Se trata de una larga pista de crecimiento y ofrece buenas perspectivas para los mercados de renta variable”.
Señala que la creciente vinculación con el resto del mundo hizo que el aumento global de los precios de la energía y los alimentos debido a las tensiones geopolíticas repercutiera en el cuadro macroeconómico de la India, pero el mercado de renta variable resistió gracias a la solidez de la economía nacional y a los flujos internos.
Sin embargo, el impacto de la inflación se vio suavizado por las medidas adoptadas por el Gobierno y los bancos centrales.
El analista de Schroders destaca que Los flujos internos frente a las salidas de los inversores extranjeros han mantenido la resistencia del mercado de renta variable. “Los resultados anunciados en la última temporada de resultados apuntan a un fuerte crecimiento de los ingresos, pero también se aprecian presiones en los márgenes debido al aumento de los precios de las materias primas. Un fuerte crecimiento económico suele traducirse en un aumento de los beneficios de las empresas. El crecimiento de las ganancias para el índice nacional de primera línea (NSE NIFTY 50) se estima en torno al 9-10 % para el ejercicio que finaliza en marzo de 2023 y en torno al 15 % para el ejercicio que finaliza en marzo de 2024. La índice cotiza por encima de sus valoraciones medias a largo plazo, con un ratio precio/valor contable de 3,1x y un ratio precio/beneficio de 21x basado en un crecimiento de las ganancias del 10 % en marzo de 2023”.
Señala que los sectores con vínculos mundiales, como el metalúrgico y el de las tecnologías de la información, siguen viendo rebajados sus beneficios en previsión de una desaceleración económica mundial. “Incluso algunos sectores del consumo nacional están registrando una recuperación de la demanda y de los márgenes más lenta de lo previsto. Los resultados, los comentarios de los directivos y las orientaciones anunciadas por las empresas de mediana y pequeña capitalización están indicando que las valoraciones en estos segmentos pueden estar al límite”.
India necesita mucha más inversión extranjera para financiar sus necesidades de gasto de capital, según los expertos
Advierte que la India cotiza actualmente a primas históricamente elevadas, superiores al 80 %, con respecto a otros mercados emergentes. “Se trata de un riesgo clave en caso de que el sentimiento o la liquidez se desplacen a otros mercados”.
En su opinión, los fundamentos y las perspectivas a medio y largo plazo siguen siendo estables para la renta variable india. Pero a corto plazo se enfrentan a posibles vientos en contra derivados de los precios del petróleo, la inflación, las tasas de interés y los flujos de fondos. “Esto no significa necesariamente que deban esperarse correcciones de los precios, pero es posible que el rendimiento sea relativamente inferior al de otros mercados”.
Cree que el mercado “ya ha digerido varios aspectos negativos y puede continuar su trayectoria alcista, aunque con volatilidad”, e indica que seguirán “buscando e invirtiendo en una cesta de oportunidades específicas de valores que tengan potencial para ofrecer un rendimiento superior”.
Ahorro de los hogares
En los mercados nacionales indios, el ahorro de los hogares se desvió en 2022 hacia activos de riesgo como la renta variable, ya que los activos tradicionales, como el sector inmobiliario y el oro, arrojaban rendimientos entre negativos e insignificantes. Los depósitos a plazo fijo arrojaban rendimientos reales negativos.
Hasta octubre de 2022, las entradas en renta variable de los inversores nacionales se acercaron a los 40.000 millones de dólares (lo que incluye los planes de ahorro regulares en fondos de inversión, que supusieron 18.000 millones del total), mientras que los inversores extranjeros retiraron más de 20.000 millones.
“Un aumento de las tasas de interés podría desviar de nuevo parte del ahorro de los hogares hacia instrumentos de renta fija, y éste sigue siendo un parámetro clave a vigilar”, destaca Jigar Gandhi.