El efecto rebote que se augura para la economía mundial en 2021, tras un 2020 económicamente crítico, parece que traerá grandes noticias para los productores materias primas y para los inversores que decidan apostar por ellas. De acuerdo a la proyección de los expertos de Goldman Sachs, existe para el año que viene una “sobreponderación” para las materias primas. Entre ellas, el sector agrícola ofrece “posiblemente, la mejor cobertura contra la inflación probable y preparado para otro mercado alcista”.
El banco pronostica un rendimiento en el índice de materias primas de alrededor del 27% durante un período de 12 meses. También señala que la agricultura, junto con los metales básicos, tuvieron más ventajas a corto plazo que el petróleo en la recuperación de la demanda de China.
Con el impulso de Goldman, las materias primas cierran así una semana positiva, con subidas y con buenas perspectivas para el conjunto de analistas. Entre los metales industriales el níquel está entre los más alcistas, con un avance de casi el 15% en el año. Las subidas de la aleación de aluminio en la Bolsa de Metales de Londres acumulan una revalorización que supera el 20% en lo que llevamos de 22% en 2020. Es el metal pesado más alcista en lo que va de año, entre los principales que recoge Bloomberg.
El escenario general de los metales industriales es de deterioros en la oferta. «La caída de la oferta ha sido sustancial en todo el espectro durante el año, manteniendo a raya las sobreofertas, especialmente en los metales del grupo del platino, los relacionados con el carbón, en la plata y en el zinc», explican desde Citi. Avisan, eso sí, de que es probable que por la parte de la oferta ya se haya puesto en precio este deterioro, por lo que mayores subidas dependerían de que se produzca una mayor recuperación de la demanda.
«Los riesgos para la producción siguen siendo abundantes de aquí a final de año, pero el impacto en los precios es limitado, con la mayor parte de los metales recogiendo ya las políticas chinas [orientadas a la reducción de la contaminación] en su precio», explica el banco estadounidense.