«La desaceleración del crecimiento de China y las preocupaciones sobre la inflación mundial podrían traer vientos en contra a los activos de riesgo. Las perspectivas sobre los tipos de interés mundiales siguen siendo turbias para los participantes del mercado, mientras que los mercados de crédito en EEUU han reaccionado de forma mixta al aumento de los rendimientos. Es probable que la renta variable mundial se encuentre bajo presión en los próximos meses». Así se expresan lo anaistas de Citi en una nota para clientes, titulada «Winter is coming», en la que dibujan el futuro de los mercados en los próximos meses, con una recuperación económica que parece perder fuelle y una presión inflacionaria que se incrementa.
Es probable que la renta variable mundial se encuentre bajo presión en los próximos meses. El aumento de los rendimientos de los bonos y el debilitamiento de los beneficios por acción son vientos en afirman estos expertos
Ante este escenario, «es probable que la renta variable mundial se encuentre bajo presión en los próximos meses. El aumento de los rendimientos de los bonos y el debilitamiento de los beneficios por acción son vientos en contra para las valoraciones de las acciones. Además, el índice Levkovich revelaba al comienzo del primer trimestre que había una probabilidad histórica del 100% de mercados bajistas en EEUU en un período de 12 meses», explican los economistas de Citi.
Los analistas de Citi consideran que «la crisis de suministro de energía y carbón de China persistirá durante el invierno… se espera que esta crisis fuerce un recorte del 12% en el uso de energía industrial en el cuarto trimestre del año, aumentando los riesgos de estanflación y las presiones de crecimiento. Los malos datos durante la Semana Dorada del Día Nacional de China pueden estar dejando entrever un camino lleno de baches para que el consumo se recupere».
Sobre la presión inflacionaria, desde BNP Paribas advierten de que «la sensibilidad del mercado a los datos de inflación puede aumentar aunque las expectativas se mantengan relativamente ancladas. Como la tasa de inflación lleva un tiempo por encima del objetivo de la banca central, esto podría reducir la paciencia para que los precios caigan por debajo del objetivo del 2%. Esta mayor sensibilidad debería conducir a una mayor volatilidad de los mercados de renta fija y renta variable, lo que a su vez puede afectar a la economía real», advierten estos expertos.