Bankinter, en su informe de Estrategia de Inversión para el cuarto trimestre del año, reconoce que el mercado «deberá terminar de romperse antes de empezar a recomponerse».
«Sólo cuando la inflación remita y los bancos centrales rebajen su agresividad, insinuando cuándo podrían volver a bajar tipos, mejorará la situación. Sólo entonces, y siempre que las estimaciones macro y de resultados empresariales hayan dejado de revisarse a peor», afirma el equipo de análisis de la entidad dirigido por Ramón Forcada.
La entidad reconoce que el mercado «deberá terminar de romperse antes de empezar a recomponerse»
Según sus analistas, mientras eso no suceda, los rebotes que puedan darse en las bolsas «serán inconsistentes y desconfiables».
En un contexto «tan complejo», el banco identifica el periodo de diciembre de 2022 a febrero de 2023 como el más probable, «y no antes», para que la situación toque fondo en términos de expectativas. «A continuación el mercado se estabilizará y empezará a mejorar, pero deberá terminar de romperse antes de recomponerse», remarca.
Mientras la situación toca fondo definitivamente, Bankinter indica que cualquier nivel de entrada inferior a los 3.700 puntos del S&P500 implica «un riesgo de error asumible, siendo reducido en el rango de 3.500/3.300, siempre con perspectiva 2023/2024».
El banco explica que es imposible vender en máximos y comprar en mínimos, por lo que lo más razonable, en su opinión, es «reposicionarse progresivamente» mientras el proceso de ajuste encara su probable final para así poder beneficiarse de precios atractivos con una perspectiva de 12/24 meses.